Y según los ecologistas, hasta que se invente la fusión fría, algo así sucede con Industria y Medio Ambiente. Pues, a pesar de que tal comparación pita tiempo ha en sus oídos, el Gobierno regional sigue empeñado en mantener la doble consejería, ahora con un nuevo titular. Y como cada consejero está obligado a velar por los intereses de su cargo, Benito Mercader tendrá que ponerse ante el espejo, buscar su alter ego o desdoblar su personalidad para enfrentar las necesidades industriales con las medioambientales. Esto, siempre y cuando su mitad ecologista no exista sólo para cubrir el cupo de una conciencia que comienza a arraigar en el planeta . Hace tiempo que la actual Ley del Suelo, su desfase y sus lagunas han favorecido un uso del suelo más soportable que sostenible. Esperemos que el entrante favorezca una nueva ley (que no normativa) antes de que Murcia aporte su granito de arena para el día en que, como dijo el jefe indio, nos demos cuenta de que «el dinero no se puede comer».