La compañía Ryanair ha mostrado este viernes sus "disculpas por el retraso y las molestias causadas" y ha aclarado que el vuelo FR9342 de Sevilla-Pisa sufrió un retraso de una hora en Sevilla debido a "un problema técnico", lo que llevó a que se estropeara el sistema de aire acondicionado a bordo.

En una nota, Ryanair ha indicado que el capitán siguió las instrucciones de la torre de control para mover el avión a una posición diferente y esperar a la asistencia técnica. Entonces, según relata la compañía, un pasajero abrió la puerta de emergencia del avión y desplegó la rampa de evacuación, desde ese momento, "todos los pasajeros fueron obligados a desembarcar" por parte del capitán, ya que "ese avión ya no podía operar con un tobogán desplegado".

Asimismo, señala que la policía fue llamada para hacer frente a los pasajeros "responsables de este trastorno" y los pasajeros del vuelo Pisa, "con exclusión de los pasajeros insubordinados", continuó su viaje en un avión de reemplazo con un retraso de cuatro horas.

Ryanair opera más de 1.500 vuelos diarios con 44 bases y más de 1.300 rutas de bajo coste a lo largo de 27 países, conectando 160 destinos. Cuenta con una flota de 272 nuevos Boeing 737-800 con pedidos en firme para otros 40 nuevos aviones (pendiente de contabilizar las ventas acordadas) que se entregarán durante el próximo año medio. En la actualidad cuenta con más de 8.500 empleados y la previsión de transportar alrededor de 73 millones de pasajeros en el actual año fiscal.