La fiscal delegada de Seguridad Vial, Adoración Peñín, ha dicho este jueves que los asuntos asociados a la conducción bajo los efectos del alcohol y sin permiso siguen presentando "una tasa elevada". En el cómputo global, los 2.204 procedimientos de tráfico representaron casi un tercio de todos los que se tramitaron en 2010 en los juzgados asturianos.

En una rueda de prensa para hacer balance del trabajo del departamento, ha dicho que se trata, por lo general, de delitos menores que, salvo reincidencia, llevan asociadas penas de multa y privación del derecho a conducir y que se juzgan con rapidez en un 80 por ciento de los casos, con la aceptación de la propuesta de pena por parte del infractor.

No obstante, ha valorado que en el conjunto del territorio se produjo un descenso de los comportamientos susceptibles de constituir un delito contra la seguridad vial del 7,23 por ciento. "Han bajado un poco, pero deberían hacerlo más. La sociedad debería convencerse de que es una conducción peligrosa que da lugar a gravísimas consecuencias , desde fallecimientos a lesiones graves", ha señalado.

Por zonas, el año pasado se apreció un repunte del 6,55 en Avilés, se estabilizaron en Gijón, donde se registró una variación del 0,48 por ciento, y descendieron de forma acusada en Oviedo y Langreo a razón del 17,56 y del 18,60 por ciento respectivamente.

Peñín ha subrayado además la excelente labor del servicio responsable de las penas de trabajos en beneficio de la comunidad, que permitió que el año pasado se cumplieran "con absoluta normalidad y sin retraso".

Junto con los accidentes asociados al consumo de alcohol y drogas tóxicas, la titular del departamento ha expresado su preocupación por los despistes al volante que concluyen en despeño.

Por último, y pese a representar una cifra poco significativa, ha advertido sobre la responsabilidad penal de las empresas que, por la actuación irresponsable del empleador, coadyuvan.