La Guardia Civil ha detenido a una pareja por apropiarse de más de 21.000 euros de una anciana ingresada en un centro geriátrico situado en el municipio de Piélagos, realizando extracciones de dinero de su cuenta bancaria. Los hechos fueron denunciados por la dirección del propio centro, donde había trabajado la mujer detenida.

Los acusados son un hombre natural de Argelia, O.A., y una mujer de nacionalidad española, M.I.G.S., a los que se les considera responsables un delito de robo, ha informado este viernes la Guardia civil.

La dirección del geriátrico informó el pasado 26 de mayo a la Guardia Civil de que sospechaba de que se habían producido irregularidades en la cuenta bancaria de una mujer ingresada, ya que se habían registrado extracciones de dinero en cajeros automáticos sin que la anciana hubiera salido del centro.

Las investigaciones determinaron que desde el pasado mes de febrero se habían realizado extracciones de dinero que superaban los 21.000 euros con la cartilla de la víctima en cajeros automáticos de Santander, en diferentes fechas y horas.

Los agentes sospecharon que estas extracciones tenían que haberse realizado por alguna persona cercana a la víctima y que tuviera acceso a su cartilla, por lo que las pesquisas se centraron sobre empleados o personas que tuvieran contacto con ella.

En concreto, se determinó que la detenida era una de las personas que prestaba asistencia directa a la anciana cuando trabajaba en el centro.

Aunque por el momento se han contabilizado más de 21.000 euros, la Guardia Civil continúa las gestiones para saber la cantidad exacta extraída.

Ante estos hechos, el instituto armado ha recomendado a las personas mayores que no guarden sus cartillas o tarjetas bancarias junto a las claves de las mismas, y que no faciliten su localización a personas desconocidas, ni las cedan a terceras personas, para evitar así extracciones de dinero.

La Guardia Civil tiene en funcionamiento el Plan Mayor Seguridad, por el que realiza actividades informativas sobre esta materia en centros de mayores, hogares de la tercera edad o residencias.

El cuerpo aconseja a los profesionales de los centros o a los propios mayores que si observan alguna irregularidad, lo pongan en conocimiento del puesto de la Guardia Civil más cercano.