La ONCE repartió más de 17 millones de euros en premios durante el año 2010 en Baleares, donde, además, invertirá más de 1 millón de euros para prestar servicio a las 1.271 personas con discapacidad visual que residen en la región, entre las que se encuentran 165 niños y jóvenes que cursan sus estudios en centros ordinarios.

Así ha informado en rueda de prensa el delegado territorial de la ONCE en Baleares, José Antonio Rodríguez, y la presidenta del Consejo Territorial, María del Carmen Soler durante el acto de presentación de los nuevos responsables de la ONCE en las islas, a raíz de las elecciones del pasado mes de marzo.

Ambos han remarcado que la ONCE cubre las necesidades de las personas ciegas y deficientes visuales de Baleares ofreciendo servicios de diferentes características como son educativos, culturales, deportivos, de impulso al empleo, técnicos y tecnológicos, o de apoyo a la movilidad. De esta manera, se pretende que las personas con deficiencia visual puedan alcanzar una autonomía personal suficiente para facilitar su plena integración social.

La ONCE y su Fundación emplea a 763 personas en Baleares, de las cuales 597 son agentes vendedores de los distintos juegos que se comercializan.

Además, a nivel estatal 130.000 personas directa e indirectamente dependen de la ONCE y su Fundación, de las que 105.000 tienen algún tipo de discapacidad. De esta entidad también forman parte 70.000 invidentes.