El alcalde de Lleida, el socialista Àngel Ros, ha defendido este viernes, tras el desalojo de los 'indignados' de la plaza Ricard Vinyes, que "en las plazas no se puede vivir ni acampar".

Ros ha considerado que los ciudadanos que lo deseen se pueden manifestar, concentrar y hacer sus protestas en todo el espacio público tal como marca el ordenamiento jurídico y los derechos constitucionales que los asisten.

"En este caso las autoridades no sólo reconocen estos derechos, sino que ponen los recursos de los cuerpos de seguridad porque puedan ejercerlos con garantías", ha aseverado.

El alcalde ha explicado que la decisión de desalojar la plaza de Ricard Vinyes ha sido de la Generalitat, a través de los Mossos d'Esquadra, "que son quienes tienen la competencia del orden público".

"La Guardia Urbana ha colaborado en el marco de sus atribuciones de vía pública y respecto a las ordenanzas municipales", ha concluido Ros.