Antonio Rodrigo Torrijos: "La gente se ríe, pero sigo soñando con ser el alcalde de Sevilla"

Nació el 6 de noviembre de 1950 en Sevilla. Estudió Infantil y Primaria en el Colegio Mesón del Moro y continuó su formación en el centro San Diego y en el instituto San Isidoro. Es ATS-DUE en especialidad de Psiquiatría. Está casado y tiene una hija que lo acompaña en la lista electoral.
Nació el 6 de noviembre de 1950 en Sevilla. Estudió Infantil y Primaria en el Colegio Mesón del Moro y continuó su formación en el centro San Diego y en el instituto San Isidoro. Es ATS-DUE en especialidad de Psiquiatría. Está casado y tiene una hija que lo acompaña en la lista electoral.
G. ESCOLÁSTICO
Nació el 6 de noviembre de 1950 en Sevilla. Estudió Infantil y Primaria en el Colegio Mesón del Moro y continuó su formación en el centro San Diego y en el instituto San Isidoro. Es ATS-DUE en especialidad de Psiquiatría. Está casado y tiene una hija que lo acompaña en la lista electoral.

Los que están a su lado dicen que es muy trabajador y exigente, pero que sabe funcionar en equipo, se deja aconsejar y escucha las consideraciones de sus colaboradores. Desde pequeño quería ser político. No en vano su madre fue una de las primeras alcaldesas del país. Ahora afronta las elecciones siendo el único candidato que forma parte del equipo de Gobierno actual.

Dimisiones, imputaciones... ¿cómo afronta estas elecciones con tanta carga a las espaldas?

Con mucha ilusión y esperando que la ciudad valore e identifique con Izquierda Unida las transformaciones que ha sufrido Sevilla.

¿Cree que puede ser el próximo alcalde de Sevilla?

La gente se ríe cuando digo que aún tengo la ilusión de ser el alcalde. ¿Por qué no? Si los 70.000 sevillanos que se han beneficiado de Sevici, los 34.000 del bonobús solidario, los 18.000 de los presupuestos participativos, los 7.000 que han obtenido una vivienda de calidad y los más de 200.000 que se han beneficiado de la revolución deportiva interpretan que todo eso lo ha hecho IU, ¿por qué no voy a soñar con ser alcalde?

¿Pero cree que a la gente le llega que usted ha hecho esos cambios?

Tengo mis dudas, porque hay un permanente debate que confronta la Sevilla real con la virtual. Quienes hablan de esta última dan una imagen de ciudad caótica, sucia y abandonada. Y la Sevilla real se puede conocer dándose un paseo por el río, por la Constitución, el centro, la Plaza Nueva, Asunción, San Jacinto...

Juan Espadas (PSOE) ha dicho que no se plantea alianzas. ¿Tiene miedo de que no quiera pactar con IU?

Espadas tiene cierta incontinencia verbal. Yo no voy a hablar de pactos antes de las elecciones.

Sea sincero. ¿Qué cree que va a pasar el domingo?

Se está haciendo mucha inversión privada en encuestas que no son receptoras de opinión, sino generadoras. Pero la encuesta fundamental es la del 22-M y tengo expectativas de que IU esté en el Gobierno.

¿Cree que hay una campaña contra su persona?

Llevo dos años soportando que denosten mi pensamiento político y mi vida privada. Hay un conglomerado de intereses que está coadyuvando para sacar a IU del Gobierno.

¿Cuándo se enteró de que estaba imputado en el caso Mercasevilla?

Por la prensa el 7 de abril, un día antes de que IU firmara el Código Ético. Conclusión: ha aparecido un nuevo partido, el de la casualidad. Pasó lo mismo en 2003 y en 2007.

¿Qué factura personal le ha pasado este asunto?

Es una pequeña losa, porque siempre he tenido un comportamiento recto en mi modo de vida y mi trayectoria. Que te condenen molesta y duele.

Convenza a los sevillanos de que es inocente.

En el régimen anterior todos eran culpables hasta que se demostraba lo contrario. Ahora es al revés. Quien acusa tiene que demostrar la veracidad de los delitos. ¿Por qué se me ha acusado ya?, ¿por qué se afirma que soy responsable de un delito? El auto no lo hace.

¿Por qué se vendió el suelo del mercado a una empresa cuando era mejor la oferta de otra?

Defendí un concurso, al igual que lo hicieron el resto de las fuerzas. ¿Por qué sería yo el responsable? Era el vicepresidente segundo, pero había uno primero y también un presidente.

Pero hay cuatro líneas de investigación en este caso. Alguien lo habrá hecho mal...

No le deseo a nadie lo que no deseo para mí, así que no acuso a nadie. Todos los delitos tienen que probarse.

¿Se arrepiente de haberse hecho la foto de la mariscada?

Me arrepiento de mi ingenuidad, porque no creo que haya que ocultar las cosas. Pero ya no me pasa más. La foto se hizo hace tres años en una Feria Internacional del Marisco que queríamos traer a Sevilla. Éramos nueve personas, aunque en la fotografía solo aparezcan dos y, una vez más, aclaro que la comida no se pagó con dinero público.

¿Cree que estos escándalos le pasarán factura el 22-M?

Tengo mis dudas, aunque espero que la ciudadanía no se deje engañar.

La pregunta del millón: ¿Se le ha pasado por la cabeza dimitir?

No. Cuento con el apoyo de mi organización, que está convencida de mi honradez. Además, le haría un servicio impagable a los muñidores de esta campaña contra mí.

¿Ha hablado con su colega Gaspar Llamazares?

No, no me ha llamado. Creo que sobre todo los dirigentes de alta importancia tendrían que simplemente haberme llamado antes e informarse, y después emitir su opinión, tan libre como cualquier otra. No lo hicieron y lo lamento. Pero no me ofende, tengo un respeto absoluto hacia todos mis compañeros.

¿Qué opina del momento por el que está pasando el PSOE-A?

No quiero introducir ningún factor de crispación sobre otras fuerzas políticas. Si el PSOE tiene problemas, le deseo que los resuelvan.

No fue a la inauguración de las setas. ¿No le gustan?

Mi opinión estética del proyecto Metropol Parasol me la guardo, aunque estoy seguro de que dentro de dos meses los sevillanos estarán aplaudiendo el proyecto. Lo que sí critico es el coste de la obra.

Pida su voto.

Se lo pido a la gente de IU para consolidar un modelo de ciudad más amable, más habitable, más solidaria y más igualitaria, tal y como venimos construyendo en estos últimos años. Pido el voto a los sevillanos para hacer irreversible este modelo.

En dos palabras

¿Su virtud? Perseverancia. ¿Y defecto? Impaciencia.  ¿Qué lo apasiona? La vida.  ¿Y lo relaja? El senderismo.  ¿Cuántos m2 tiene su piso? 61. ¿Ha pagado ya la hipoteca? Es una herencia.  ¿De qué está harto? De la hipocresía.  ¿Con quién cenaría en las setas? Con cualquiera.  ¿Cofrade, feriante y/o rociero? Respeto la libertad de todos, pero ninguna de las tres. ¿El barrio más olvidado de Sevilla? Polígono sur.  ¿Una bebida? El orujo. ¿Ha hecho un simpa? No, nunca. ¿Su ídolo político? Rosa Luxemburgo. ¿Una receta para el alma? Música clásica, silencio ambiental, un licor, una pipa y buena compañía.

"El motor del cambio son los jóvenes"

¿Cómo reducirá el paro?

Con un plan de choque durante el segundo semestre del año. Entre otros proyectos, el Ayuntamiento será contratante de parados de larga duración. Construiremos un parque empresarial de la economía social y dotaremos a cada distrito de un centro de formación para los jóvenes.

Es muy difícil acceder a una vivienda...

En Sevilla hay 30.000 pisos vacíos que vamos a intentar poner en valor. Bonificaremos a quien lo haga y a quien no, lo castigaremos.

¿Sevilla será más segura si usted es el alcalde?

Sevilla será una ciudad más segura el día que sea más culta, donde la educación en valores prevalezca.

El carril-bici lleva el nombre de IU. ¿Qué hará en cuanto al metro?

Estoy orgullosísimo de los carriles. En cuanto al metro, IU va a pelear por la red completa, pero somos muy francos: a día de hoy no hay proyecto ni presupuesto.

¿Cree que los jóvenes sevillanos son el futuro?

Tengo absoluta confianza en ellos. Están preparados e insatisfechos. Ellos serán el motor del cambio. Tenemos un programa específico de medidas para ellos.

Las preguntas de los lectores

Los olores causados por los excrementos de los caballos son continuos en el centro. Hay una ordenanza, ¿va a hacer algo? (roberto)

Izquierda Unida es absolutamente defensora de acabar con este problema. Nuestra propuesta es emplear un sistema de pañales o bolsas de recogida. Hasta ahora no se ha podido alcanzar el consenso con los cocheros, pero en el nuevo mandato fijaremos un encuentro.

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