El sindicato UGT ha alertado este jueves que si no hay un acuerdo inminente entre la Generalitat y Ryanair sobre los vuelos que mantendrá en el Aeropuerto de Girona a partir de octubre, se pueden llegar destruir más de un 30% de los 1.500 puestos de empleo actuales.

Además, el sindicato ha advertido de que ya se están notando las consecuencias de la reducción de vuelos y frecuencias desde Girona por parte de Ryanair, como que la compañía Lesma —empresa auxiliar de Ryanair para los servicios de tierra— ya ha despedido a nueve empleados recientemente y que además está reduciendo la jornada al resto de trabajadores.

Durante una rueda de prensa en Girona, el secretario general de la Federación de Transportes de la UGT de Catalunya, Joan Moreno, ha expuesto que en Lesma se ha pasado en los tres últimos años de 240 a 80 empleados, y que los que quedan están trabajando el doble de lo que les corresponde cobrando menos.

Ante esta situación, Moreno ha asegurado que están estudiando si empiezan a movilizarse porqué lo que está pasando en Lesma puede extenderse al resto de empresas que trabajan en el Girona-Costa Brava.

"Si en septiembre u octubre no se recuperan vuelos será cuando empezará a notarse la destrucción de puestos de empleo", ha manifestado el secretario de Política Sindical de la UGT de Catalunya, Camil Ros.

"Es urgente y fundamental cerrar el acuerdo con Ryanair", ha declarado Ros, siendo "responsables y prácticos", porque una situación como la actual no puede repetirse.

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El sindicato también sostiene que el Aeropuerto de Girona "o es un aeropuerto de 'low cost' o no es", ya que con la llegada de Ryanair, el aeropuerto pasó de 400 empleados a 1.500.

Por ello, defienden que Ryanair es una "pieza clave" para conseguir el modelo de aeropuerto transferido, que el que se han planteado y por el que apuestan, aunque también se tendrá que trabajar para conseguir una oferta de 'low cost' diversificada.

Según datos facilitados por la UGT, actualmente en el aeropuerto de Vilobí d'Onyar, hay un total de 48 empresas y 1.510 empleados que trabajan directamente para la infraestructura, que en los dos últimos años ha perdido un 12% de pasajeros, después de superar en 2008, los cinco millones de medio de viajeros.

Además es el tercer aeropuerto en beneficios, según el ranking estatal de 2009, y el quinto en ingresos, por todo ello, la UGT defiende una gestión individualizada que tenga en cuenta las peculiaridades del territorio y para ello es necesaria la transferencia de la gestión de los aeropuertos del Estado a Catalunya.