Más de 10.000 identificaciones al mes. Desde agosto de 2010, los Mossos d’Esquadra han pedido la documentación a 90.000 sospechosos y han detenido a otros 865, todos ellos relacionados con el robo y la compraventa ilegal de cobre. Las actuaciones se han llevado a cabo a raíz de la puesta en marcha de un plan específico para luchar contra este delito.

Durante este tiempo, la policía ha realizado 800 inspecciones en empresas de chatarra y en el 60% de los casos ha levantado alguna acta porque cometían infracciones administrativas: carecían de licencia medioambiental, seguro obligatorio o permisos.

El Intendente Jefe de la División Técnica de Seguridad Ciudadana, Joaquim Bayarri, confirmó este martes los datos. También añadió que los Mossos d’Esquadra han llevado a cabo 20.000 controles de carretera en zonas próximas a chatarrerías en los últimos 8 meses. Estaban enmarcados en el mismo plan especial "para evitar que el cobre de procedencia ilícita se pueda reintroducir en el mercado", afirmó Bayarri.

Paralelamente, la policía autonómica ha inspeccionado junto a la Agencia Tributaria cuatro ferreterías del Barcelonès, el Baix Llobregat, el Tarragonès y les Garrigues y, si bien no han detectado cobre de dudosa procedencia, sí que han localizado otras irregularidades, como en el libro de registros.

Precisamente, este martes, trascendió que dos personas más, un hombre y una mujer, han sido detenidas en los últimos días por hurtar cobre y plomo en una empresa de Corçà. Los presuntos ladrones sustrajeron 100 kilos de cableado de cobre y otros 200 kilos de retazos de tuberías de plomo.