El candidato del PSOE a la Alcaldía de Valladolid, Óscar Puente, propuso hoy la puesta en marcha de un servicio de autobuses más pequeños y rápidos y con más frecuencias en enclaves de poca población, como el barrio de Las Flores, que recorrió puerta por puerta buzoneando y saludando a los vecinos, minutos antes de ofrecer un mitin exprés en la plazoleta.

El político socialista, que abrió la jornada con un recorrido por el mercadillo de Rondilla, recordó más tarde en Las Flores que el barrio sigue esperando, tras la inauguración del Consultorio médico de la calle La Flor, que se complete la operación urbanística que debería haber ido asociada a la tardía y oportuna apertura del consultorio, "con años de retraso, y justo ahora, en campaña electoral".

Así, Puente ha recordado que los vecinos reclaman al alcalde que salga de las urnas el domingo 22 que se cumpla con la promesa realizada por León de la Riva hace demasiados años, de "realojar a las familias gitanas que viven actualmente hacinadas en infraviviendas en esa calle, y que los vecinos del barrio puedan recuperar el uso de esa vía pública".

Puente afirmó, como lo hizo en otras ocasiones anteriores en las que visitó Las Flores, que esa es una actuación prioritaria en su agenda para el barrio, que conoce "de memoria" y que seguirá visitando frecuentemente, si gana la Alcaldía, tal y como ha hecho desde la oposición.

El candidato del PSOE fue también interrogado acerca de las mejoras que puede proponer para el transporte público, puesto que los servicios de AUVASA son poco frecuentes, a lo que Puente respondió con su compromiso de que "el tiempo máximo de espera en cualquier parada de autobús no supere los diez minutos", aunque señaló que, con probabilidad, habría que replantearse los vehículos que cubrieran líneas de este tipo.

En su opinión, en barrios poco populosos como Las Flores bastaría con autobuses más pequeños, ligeros y rápidos, que serían suficientes para transportar a los potenciales usuarios y con los que podrían incrementarse las frecuencias.

El líder socialista reiteró que, si es alcalde, no recibirá a los vecinos en el Ayuntamiento, sino que serán ellos los que le reciban a él a la puerta de sus casas, puesto que "seguirá en la calle, como lo ha estado este mandato, los próximos cuatro años".