El alcalde de Valladolid y candidato a la reelección, Francisco Javier León de la Riva, ha justificado este martes su ausencia en debates electorales, como el que esta tarde se celebra en el barrio de la Rondilla, en que mientras los candidatos que están "desesperados" pueden ofrecer "todo", él que ha aseverado que quiere gobernar, tiene que ser "tremendamente comedido".

En declaraciones recogidas por Europa Press, León de la Riva ha subrayado que no irá al debate al que ha sido invitado por la Asociación Vecinal Rondilla porque nunca lo ha hecho y por que no tiene "medio minuto libre" en campaña. De hecho, ha confesado que prefiere visitar los centros de dependientes de Cáritas, algo que hará hoy.

Por ello, ha sido cuestionado de nuevo por su negativa a debatir con el candidato socialista, Óscar Puente. "He dicho que debatiré con quien mi partido me diga que tengo que debatir", ha respondido, antes de puntualizar que "cuando uno está a la desesperada", en referencia a Puente "pide todo y prometer todo"; quien realmente quiere gobernar y confía en hacerlo ha de ser "tremendamente comedido".

A juicio de León de la Riva las ofertas "a la desesperada" son "tremendamente peligrosas porque o van a hundir al ciudadano a base de impuestos o van a crear un caos en la ciudad", motivo por el cuál ha apuntado que durante la campaña dará respuesta a las propuestas que lee procedentes de otros partidos.

En este sentido, ha apuntado que "posiblemente" el concejal de Movilidad, Manuel Sánchez, recabará información a Auvasa sobre cuanto costaría establecer la gratuidad del autobús para niños menores de 12 años, una de las propuestas de Óscar Puente. "Cuando se dice que ampliar el transporte infantil con carácter gratuito cuesta 30.000 hay que recordar que lo dice la misma persona que arreglaba Puente Duero con un millón de euros. A nosotros nos costó 4,5", ha recalcado.

De hecho, ha augurado que los técnicos de Auvasa cifrarán en unos 300.000 euros el coste de la promesa electoral de Óscar Puente. Del mismo modo ha rechazado por gravosa la intención de que los autobuses tengan frecuencias de diez minutos, también planteada por el concejal socialista. "Habría que decirle si se ha molestado en saber cuántos autobuses hay que comprar para cumplir con ese compromiso, en cuántas personas hay que ampliar la plantilla para cumplir ese compromiso y cuál es el deficit brutal que va a generar", ha aseverado.

Al respecto de los autobuses, ha anunciado que el próximo día 13, fiesta de San Pedro Regalado, los autobuses serán gratuitos en Valladolid, ya que el Ayuntamiento ha recuperado el apoyo de Repsol perdido en 2010. Tradicionalmente la compañía de hidrocarburos financiaba el consumo de los vehículos el día del patrón vallisoletano, pero al año pasado había "perdido la costumbre".