El rector de la Universitat de València, Esteban Morcillo, ha expresado el apoyo del equipo rectoral a la decisión tomada este jueves de cerrar los edificios del campus de Tarongers después de que alumnos procedentes de un botellón celebrado en las inmediaciones del campus entraran en las instalaciones de la UV.

En un comunicado, desde la UV se ha informado de que el equipo rectoral, formado por el rector Esteban Morcillo, la vicerrectora de Infraestructuras, Clara Martínez, y el decano de Derecho, Salvador Montesinos, se han reunido este viernes con los estudiantes representantes de la Asamblea de Representantes (ADR) de Derecho y Economía, para analizar la suspensión de las clases este jueves en el campus de Tarongers.

Durante esta reunión, el rector ha trasladado el apoyo del equipo rectoral a la decisión de cerrar los edificios universitarios, así como ha mostrado "su disponibilidad a colaborar con los estudiantes para encontrar espacios para su ocio", aunque ha reiterado la "imposibilidad de autorizar o de denegar la celebración de botellones o de concursos de paellas en la zona".

En su opinión, "no es una competencia universitaria" y además, según ha recordado, "existe un acuerdo con los vecinos del barrio para evitar este tipo de acontecimientos". Asimismo, en el encuentro se ha lamentado "la imagen que algunos jóvenes proyectaron este jueves hacia la sociedad", si bien se ha precisado que "se trató de un colectivo muy reducido entre la comunidad de estudiantes".

Con ello, desde la Universitat se ha recordado que "semanas atrás" solicitaron al Ayuntamiento "una autorización para vallar todo el Campus de Tarongers". Por su parte, el delegado del Rector para estudiantes, Daniel González Serisola, ha convocado una reunión para el próximo lunes con su Consell Asesor, que está formado por las asociaciones estudiantiles, para analizar este tema.

Los decanos de las facultades de Derecho, Ciencias Sociales y Economía decidieron en este jueves suspender las clases por seguridad después de que alumnos procedentes de un "macrobotellón" celebrado en las inmediaciones del campus de Tarongers comenzaran a entrar en las instalaciones universitarias. La fiesta, que fue convocada por los propios alumnos a través de las redes sociales, no ha sido organizada por ninguna organización estudiantil, según aclararon fuentes de la Universitat de València.