El 66 por ciento de la inversión pública que se realiza en servicios de atención a personas dependientes regresa a las arcas de la Administración regional, según un estudio elaborado por el Gobierno de Cantabria, que confirma que este sector es uno de los "más rentables" de la economía de la Comunidad Autónoma.

El estudio, en el que ha colaborado la Universidad de Cantabria y que ha presentado este miércoles la vicepresidenta regional y consejera de Empleo y Bienestar Social, Dolores Gorostiaga, pone de manifiesto que estos servicios generan más de 5.000 puestos de trabajo de forma directa e indirecta que suponen 102 millones de euros anuales en salarios.

Además, su efecto en la producción económica (costes más beneficios) asciende a 330 millones de euros al año, de los que casi 71 retornan a la Administración en forma de afiliación a la Seguridad Social, impuestos, y otros conceptos.

En concreto, por cada euro hubo un retorno de 0,66 céntimos, ha recalcado Gorostiaga, que también a destacado que por cada millón de euros que se invierte en "fortalecer" este sector de atención a la dependencia, se generan 36 puestos de trabajo "estables y con derechos".

La responsable de Bienestar Social ha puesto de relieve igualmente que, según este estudio, realizado a lo largo de 2010, año en que se atendía a unas 10.500 personas en Cantabria, las afiliaciones a la Seguridad Social relacionadas con la ley de dependencia se han incrementado más de un 40 por ciento.

En este sentido, Gorostiaga ha destacado que "no existe ningún hecho que justifique este dato" más que la entrada en vigor de la ley de dependencia y la ley cántabra de servicios sociales.

Para la vicepresidenta, estos datos demuestran que los servicios de atención a la dependencia no sólo no son un gasto, sino que suponen una inversión que fomenta la "cohesión social", mejoran el bienestar individual y colectivo, y convierten a este sector en un de los de mayor rentabilidad de Cantabria.

El estudio confirma, además, otros efectos "más difíciles" de cuantificar, según ha dicho, y que van "más allá" de la mejora de la calidad de vida, como la oportunidad que suponen de "racionalizar" el gasto sanitario con alternativas de "menor coste", entre otros.

Gorostiaga ha manifestado su deseo de que este estudio también permita "reforzar" la imagen de este sector, "clave" para la economía regional y también para la competitividad económica.

Es evidente, en su opinión, que "fortalecer" este sector contribuye a que Cantabria sea "más competitiva", tenga más capacidad para generar empleo y riqueza, así como más bienestar social.

Por eso, ha anunciado que desde el Gobierno se seguirá incrementando la inversión en el sector y la formación de los trabajadores que trabajan en él, en su inmensa mayoría mujeres, para que genere "más empleo" y desarrollo económico en la región.

Con datos a día de hoy, en Cantabria se benefician de esta prestación 18.650 personas y la Comunidad sigue siendo la primera en cumplimiento de la ley de dependencia, con una tasa de 2,57 (personas que reciben la prestación sobre el total de la población), frente al 1,56 de media nacional. ((Habrá ampliación))