La casa de citas reclamaba clientes por medio de publicidad propia, con anuncios en un periódico de tirada nacional, en donde figuraban como "chicas orientales", y en un diario chino editado en la Comunidad de Madrid, donde facilitaban teléfonos y la dirección exacta donde se encontraba el domicilio.
Entrada y registro
Las primeras informaciones hacían sospechar que en esta vivienda se encontraban menores de origen asiático en el ejercicio de la prostitución.
Por este motivo, previa autorización judicial se llevó a cabo una entrada y registro donde se intervinieron diferentes efectos que prueban la actividad delictiva: varios pasaportes de la República de China, cuadernos con anotaciones donde se reflejan nombres y cantidades de dinero, carpetas con documentación de ciudadanos chinos, diversa documentación fiscal, etc.
Gracias a esta documentación intervenida se confirma que las chicas son mayores de edad y que empleaban el domicilio como casa de citas, si bien ninguna de ellas reconoce ejercer la prostitución.
Por todo ello se procede a su arresto, acusadas de implicación en un delito relativo a la prostitución y estancia irregular.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios