El preso común más antiguo de España remite a Justicia su petición de indulto por razones humanitarias

La defensa de Miguel Montes Neiro, considerado el preso común más antiguo de España al llevar 35 años enlazando condenas sin delitos de sangre, ha remitido este miércoles una petición de indulto al Ministerio de Justicia por razones humanitarias derivadas de la mala salud del recluso.

La defensa de Miguel Montes Neiro, considerado el preso común más antiguo de España al llevar 35 años enlazando condenas sin delitos de sangre, ha remitido este miércoles una petición de indulto al Ministerio de Justicia por razones humanitarias derivadas de la mala salud del recluso.

Según consta en el documento remitido, al que ha tenido acceso Europa Press, su abogado, Félix Ángel Martín García, recuerda que Montes Neiro, nacido en Granada el 23 de abril de 1950, ingresó en prisión el 7 de octubre de 1976, y desde entonces "no ha vuelto a estar en libertad" salvo el periodo en que quedó en libertad condicional en el año 1994 y hasta 1996, en que fue nuevamente detenido y decretada su prisión; y durante el tiempo en el que ha permanecido fugado —1.604 días—.

Su estancia en prisión supera los 34 años y medio, lo que excede sobremanera el límite máximo de cumplimiento que el Código Penal establece para este tipo de delincuentes, los comunes. Para su letrado, "es obvio" que Montes Neiro ha permanecido en prisión mas de 20 años, "lo que le ha llevado al calificativo por la enorme trascendencia que ha tenido en los medios de comunicación su caso de ser el preso común mas antiguo de España".

Según sostiene su representación en la petición de indulto, Montes Neiro ha pasado la mayor parte del tiempo en módulos de conflictividad alta, a veces en situación de preventivo y cuando su conducta "dista mucho de la gravedad" de los delitos cometidos por otros presos, algunos terroristas. Por ello, su situación "excepcional" y su "grave estado de salud" hace que sea preciso "aplicar no sólo la acumulación de condenas sino el abono de las prisiones preventivas desarrolladas.

Montes Neiro "presenta una situación de plena desesperación personal y humana ya que ve cómo, pese a que ninguna de sus condenas es de las consideradas graves, delincuentes mucho más graves que él son excarcelados, como el que precisamente este miércoles ha salido de prisión tras 30 años y nueve meses, el preso más antiguo de ETA, José María Sagarduy, alias 'Gatza', que fue condenado por dos asesinatos. "Se le ha aplicado una política penitenciaria que se reitera constantemente en negativa frente a mi representado", señala su abogado.

El recluso, ante la última liquidación de condena que se le ha notificado y que le obliga a permanecer en prisión hasta el próximo 2 de septiembre del año 2021, "ya no cuenta con ninguna posibilidad de verse amparado por el sistema penitenciario o por política penitenciaria de ningún tipo y esto le ha llevado en varias ocasiones a intentar suicidarse e incluso a protagonizar intentos de fuga pues se ve postrado a fallecer en la prisión sin posibilidad de ni siquiera pasar su vejez en compañía de sus hijas".

"no ha salido jamás por el cumplimiento de las penas"

Montes Neiro, que ingresó en prisión con 26 años, no ha salido "jamás" por el cumplimiento efectivo de las penas, y lleva cumplidos de forma efectiva 10.992 días, pero aún tendría que cumplir 1.414 días más, lo que le llevaría a haber estado en la cárcel más de 45 años, que resulta "desproporcionado" para un delincuente común.

"Sólo a efectos dialécticos y argumentativos, si mi representado fuese tratado no como un preso común sino como un peligroso delincuente o en su caso incluso como un asesino y hubiera sido condenado a dos condenas de 20 años cada una de ellas, hoy estaría en libertad , contradicción injustificable en modo alguno", argumenta el abogado del preso, que podría dedicarse a la escultura —actividad que ha desarrollado en los centros penitenciarios por los que ha pasado— para permitirse "una vida plenamente integrada"

Por todo ello, su representante legal pide al ministro de Justicia, Francisco Caamaño, que le conceda la "gracia del indulto" con la extinción de las penas pendientes de cumplimiento por las razones "no sólo humanas, físicas y de salud" sino además "por no ser jurídica ni socialmente admisible que en nuestro país se den situaciones que comparativamente apreciadas evidencian un error del sistema" del que Montes Neiro ha sido "víctima y objeto".

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