Efectivos de la Unidad Médica de Emergencias (UME) de Zaragoza y Cruz Roja española han participado en la simulación de una emergencia como consecuencia de una supuesta catástrofe de origen sísmico realizada en Ayerbe, en la provincia de Huesca

El consejero de Política Territorial, Justicia e Interior del Gobierno de Aragón, Rogelio Silva, ha asistido a esta simulación acompañado por el director general de Interior, Javier Artajo, en la que ha intervenido un dispositivo médico y sanitario para recuperar y evacuar a los supuestos heridos.

Silva ha destacado la "importancia de realizar este tipo de prácticas que ha valorado como "muy necesarias para probar alta tecnología" pero también "para hacer frente a las cosas más pequeñas que parecen poco importantes pero que sí que lo son cuando uno se ve en la situación".

El consejero ha recordado que "a menor nivel" se habían llevado a efecto simulacros en la Comunidad porque "son importantes" y "ahí es donde se aprende y se ven los fallos que se pueden cometer y las soluciones que se tienen que tomar".

Asimismo, Silva ha hecho hincapié en la "importancia de la coordinación entre instituciones para atender correctamente a la población en situaciones de emergencia".

La práctica ha representado una emergencia de nivel 3 con la participación de cerca de 1.000 efectivos de los cuerpos de bomberos, Guardia Civil, Cruz Roja y miembros de la UME. Éste ejercicio ha sido el más grande realizado hasta ahora por la Unidad Militar y se ha centrado en los efectos que ha supuesto un seísmo que ha afectado a presas y embalses.

Rescates y búsquedas

Entre las actividades desarrolladas se han simulado rescates de personas bajo el agua, como en el pantano de Argüis o el embalse de la Peña; búsqueda de personas desaparecidas bajo los escombros tras el terremoto, construcción de diques y muros, achiques de agua y barro o movimientos de tierras y apuntalamientos para hacer frente a los efectos provocados por el supuesto terremoto.

Además, se ha ubicado un campamento para damnificados, un centro de recepción de ayudas y un centro de atención al ciudadano en el polígono industrial de Ayerbe, donde se ha instalado a las personas presuntamente evacuadas, con capacidad para acoger a 500 ciudadanos. El polígono está dotado con servicios como comedor, duchas o lavandería para satisfacer las necesidades de los ciudadanos asistidos.

Con este ejercicio se persigue una mejor formación de los efectivos, establecer procedimientos de actuación en emergencias de gravedad, detectar necesidades para perfeccionar los protocolos de intervención y prestar un mejor servicio en situaciones de catástrofe o calamidad.