El uso de la firma electrónica (que estará en el nuevo DNI, que presentó el Ministerio de Interior la semana pasada) y otras formas de validación de información, como claves password o certificados digitales, están haciendo que cada vez más la mayoría de trámites se puedan hacer desde cualquier punto. Sólo es necesario tener un ordenador y  una conexión a internet.

Nueva ordenanza

Aunque en algunas ciudades españolas en estos días se empieza a aplicar la firma electrónica para el pago de tasas e impuestos, en Barcelona la firma digital se puede usar para hacer gestiones municipales hace más de un año. Pero, la semana pasada, el Consitorio aprobó la Ordenanza Reguladora de la Adminstración Electrónica para controlar el uso que se hace de esta forma de validación de datos y «reconocer los derechos y deberes del ciudadano», tal como aseguró a 20 minutos el gerente de Organització de Sistemes i Informació del Ajuntament, Josep Ramón Rodríguez.

La idea es extender el uso de la firma digital para todo tipo de trámites y requerir la presencia de la persona o algún documento específico en casos concretos.

Consultas de consumo en la red

El número de consultas y reclamaciones que han llegado a la OMIC (Oficina Municipal de Información al Consumidor) han aumentado a través de la página web. El 27% de las consultas y el 26% de las reclamaciones se hacen vía internet. Así, la oficina ha pasado de 15.154 a 16.610 formularios recibidos, un 10% más que en 2005. Los temas más solicitados vía internet son las Telecomunicaciones (28,12% de las consultas), la compra de bienes y productos (8,33%) y el alquiler de viviendas (7,66%). El 6,93% de las demandas hacían referencia a los servicios, mientras que un 5,64% eran sobre compra de electrodomésticos y aparatos informáticos.