El presidente de la Asociación Lucha Motera, Juan Boria, ha solicitado mayores controles de seguridad en las zonas de reunión próximas al Gran Premio de Motociclismo que se celebra estos días en Jerez de la Frontera (Cádiz) ya que, según asegura, estas medidas se realizan "normalmente" a grupos de 60-70 personas que acuden a estos eventos y que son a quienes "no deberían hacerlo".

En declaraciones a Europa Press Televisión, Boria ha señalado que el motorista que realiza 700 kilómetros para acudir a disfrutar de un gran premio, "sabe donde va, no bebe y lleva sus papeles en reglas", y denunció que mientras a estos "motoristas de toda la vida" se les solicita la documentación del vehículo hay otros que "llevan la moto en un carro para destrozarla" o incluso que las roban y a esos no se les realiza este tipo de pruebas.

Con motivo de la celebración este fin de semana del Gran Premio de Jerez de Motociclismo, el presidente de Lucha Motera recomendó "como todos los años" a quienes acudan a esta cita "tranquilidad y calma, que formen "los grupos de siempre" en la carretera y dejen "distancia de seguridad entre sus componentes", así como que realicen "paradas de descanso cada hora y media o dos horas".

En cuanto al tipo de ambiente que se vive en estos grandes premios, sostuvo que "hay muchos ambientes", ya que mientras "mucha gente va a las carreras para ver el circuito y punto", también se produce "mucha expectación en las zonas cercanas al circuito".

"Es indudable que hay situaciones complicadas que a ningún motero de verdad nos gusta ver. A nadie nos gusta, cuando mimamos a nuestra moto como a la niña de nuestros ojos, ver cómo alguien está subiéndola de vueltas hasta romper un motor. Estas situaciones ocurren pero no es el ambiente que se vive", se quejó.

Finalmente, reivindicó al resto de conductores "mayor sensibilidad con los motoristas", ya que mientras que en una moto "la carrocería es el cuerpo del conductor", en un coche "una mala maniobra se soluciona con un arañazo". "Cuando eso ocurre con una moto muchas veces las consecuencias pueden ser muy graves para el conductor, porque es de carne no de chapa", concluyó.