El Ayuntamiento de Murcia ha conseguido en el ejercicio 2010 un superávit de 7,4 millones de euros y ha logrado la estabilidad presupuestaria tras obtener 409,7 millones de las operaciones no financieras de los Derechos Reconocidos Netos -ingresos del Consistorio- frente a los 369,8 millones de euros del total de operaciones no financieras de Obligaciones Reconocidas Netas.

Así, el resultado de esta operación es de 39,9 millones de euros a las que se les aplica los ajustes con un saldo negativo de 32,5 millones de euros para obtener los 7,4 millones de euros de superávit del Ayuntamiento de Murcia en 2010.

Respecto a este asunto, el concejal de Hacienda, Joaquín Moya-Angeler, ha asegurado que la estabilidad y el superávit es lo que tanto Europa como el Ministerio de Economía observan a la hora de determinar y medir la capacidad financiera y la solvencia de los Ayuntamientos.

En cuanto al remanente de tesorería, Moya-Angeler ha recordado que se trata de un indicador de tercera o cuarta división, ya no es el más importante para el Ministerio y para la Unión Europea que ahora se fija en los aspectos citados.

Pese a ello, dicho remanente otorga un resultado negativo de 20,6 millones de euros como resultado de la suma de los fondos líquidos a fecha de 31 de diciembre de 2010 (46,5 millones de euros), los derechos pendientes de cobro (195,7 millones), y las obligaciones pendientes de pago (-119,0) que otorga un remanente total de 123 millones de euros, pero que con los ajustes que se aplican (-143,7 millones) dan la cifra de 20,6.

El concejal de hacienda también ha dado a conocer los datos del resultado presupuestario consolidado que ha sido de 26,9 millones de euros, debido a que los derechos reconocidos del ejercicio han sido mayores que las obligaciones.

Al hilo de este asunto, Moya-Angeler ha explicado que esos derechos han sido de 434,7 millones de euros frente a los 421,4 millones, que junto a los 13,6 millones de euros de ajustes positivos de financiación ha arrojado el saldo positivo de 26,9.

En cuanto a estos ingresos, de los derechos reconocidos se han ingresado 357 millones de euros que hace alusión a los impuestos tales como el IBI, IVTM, IAE, plusvalía o la tasa de basuras, así, respecto al gasto no ha se han superado las previsiones, con el ahorro como elemento fundamental, según el edil de Economía y Hacienda.

Moya-Angeler ha asegurado que este ahorro se ha producido por la puesta en marcha del Plan de Austeridad que ha congelado los sueldos a concejales, altos cargos y personal eventual, reducido las aportaciones a festival o la reducción de la factura eléctrica, entre otros.

Respecto a este asunto, el edil ha recordado que todo esto se ha conseguido pese a que el Estado ha dejado de aportar 15 millones de euros y los ingresos derivados han disminuido en 42 millones por lo que conseguir estas cifras es "aún más complicado".

Capacidad de endeudamiento

Por otra parte, el edil de Economía y Hacienda ha asegurado que la situación de endeudamiento del Ayuntamiento se sitúa en un 55,5 por ciento mientras que el límite está en el 75 por ciento. El nivel de endeudamiento se mide según el presupuesto del Consistorio para un ejercicio, con lo que Murcia podría endeudarse, si lo necesitara, en 75 millones de euros más.

Ha afirmado que de momento no se va a necesitar por el trabajo lleva a cabo los trabajadores del ayuntamiento, pero este dato sirve como indicador de la situación económica del municipio y como referente de cara al Ministerio de Economía.

Asimismo, en comparación con la deuda del año 1999, se observa que el nivel de endeudamiento del Ayuntamiento ha descendido puesto que hace 11 años se situaba en un 124 por ciento con un límite legal de 125 por ciento. En el año 2010 la deuda se situó en un 59,8 por ciento y este ejercicio en un 55,5, 20 puntos menos que el nivel permitido desde el año 2010 que se redujo de 110 al 75 por ciento.

El edil de Economía y Hacienda ha comentado que solamente se pueden conseguir estas cifras con mucho trabajo y priorizando el dinero del que se dispone, pero nunca abandonando nuestra función social como regidores del dinero público, por lo que no podemos dejar de ayudar y destinar fondo a los ciudadanos que más lo necesitan.