La Consejería de Presidencia y Justicia del Gobierno de Cantabria subvencionará con 550.000 euros la campaña 2011 de salvamento y socorrismo en playas, tal y como recoge un anuncio publicado hoy en el Boletín Oficial de Cantabria (BOC).

El Gobierno regional pretende así colaborar con los ayuntamientos, que tienen competencia exclusiva en este ámbito, con el objetivo de mantener unos adecuados niveles de seguridad en las playas de la región y minimizar riesgos.

Las corporaciones locales que se acojan a las ayudas deberán garantizar el servicio de salvamento en sus playas todos los fines de semana y festivos desde el 1 de junio al 30 de septiembre.

El servicio deberá prestarse diariamente entre el 16 de junio y el 15 de septiembre en los municipios con mayor afluencia de bañistas (Castro Urdiales, Comillas, Laredo, Noja, Piélagos, Ribamontán al Mar, San Vicente de la Barquera, Santa Cruz de Bezana, Santander, Santoña y Suances) y, también cada día, del 1 de julio al 31 de agosto en los demás ayuntamientos.

La cuantía individual máxima que podrán recibir las corporaciones locales alcanza los 100.000 euros y las solicitudes podrán presentarse durante un plazo de 15 días hábiles, contados a partir de mañana, en el Registro General del Gobierno de Cantabria.

El operativo de este año estará formado por unas 300 personas (sanitarios y conductores, patrones y socorristas a pie de playa), que contarán con el apoyo y coordinación del personal del Centro de Coordinación de Emergencias 112 y del Servicio de Protección Civil del Gobierno de Cantabria.

Además, el dispositivo de playas contará con 12 ambulancias y 17 embarcaciones.

Balance campaña 2010

Los servicios de salvamento y socorrismo en playas atendieron en la campaña de verano del pasado año un total de 11.249 incidencias, lo que supone un incremento del 19,3% respecto a la campaña estival de 2009.

Además, 259 personas fueron rescatadas del agua y 222 tuvieron que ser trasladadas a centros hospitalarios.

Durante el pasado verano tuvo un gran protagonismo la 'carabela portuguesa'. El Plan de Recogida de esta especie, organizado por la Consejería de Presidencia, permitió la retirada de 2.127 ejemplares, y se contabilizaron un total de 268 picaduras.