Solchaga descarta que hasta final de año se cree empleo por el excesivo endeudamiento y la falta de consumo

El ex ministro socialista ve en las exportaciones y el turismo dos de las vías de escape a la crisis

El ex ministro de Economía, Carlos Solchaga, ha augurado este miércoles en Gijón que probablemente no será hasta finales de este año cuando se pueda crear empleo, ya que la recuperación está siendo "extremadamente lenta", por un lado, por el excesivo endeudamiento de empresas y ciudadanos y, por otra, por la falta de consumo debido al miedo a la pérdida de trabajo y de nuevo al endeudamiento familiar, que ha hecho aumentar "brutalmente" la tasa de ahorro.

Así lo ha indicado durante su participación en el XI Seminario Europeo sobre el Empleo 'Argumentos y fanatismos del mercado' en el Centro de Cultura Antiguo Instituto Jovellanos, organizado por la Asociación de Periodistas Europeos.

Unido a ello, ha explicado que las empresas, por su lado, descartan aumentar la capacidad de producción al no tener sentido hacerlo si no hay mucha demanda de consumo, mientras que también hay quien tiene una capacidad de producción instalada ya muy grande, y, en tercer lugar, hay una falta de acceso al crédito. Es por ello que, "ni de consumo privado ni de inversión de las empresas podemos esperar la salida de la crisis", ha apuntado.

Solchaga ha sostenido que la esperanza está donde siempre, en las exportaciones de bienes y servicios, a lo que ha sumado la buena marcha del comercio internacional de los países emergentes. No ha olvidado tampoco el sector del turismo, con un aumento de un cuatro por ciento de visitas y más de un seis de gasto, por lo que cuando la demanda exterior aumente, el consumo se irá animando y la capacidad de producir para los mercados internacionales también.

En la órbita de países intervenidos

En cuanto a la situación económica, ha señalado que Portugal está en peligro de intervención, mientras que España no está fuera dela órbita de países que pudieran ser intervenidos. Pese a ello, ha asegurado que hoy la gente distingue muy bien entre Portugal y España y ha mantenido que esta última puede manejar la situación de endeudamiento mejor, por lo que su caso es distinto al del país luso, Grecia e Irlanda.

Solchaga, asimismo, ha opinado que las agencias de 'rating' se han equivocado "gravemente", aunque ha recordado que fueron los banqueros quienes inventaron los llamados productos financieros 'tóxicos'. No por ello, ha considerado que estas agencias vayan a perder credibilidad por error, pero sí puede que su integridad o autoridad moral.

Es por ello que ha señalado que no estaría mal contar con una entidad pública a la que puedan acudir todos a consultar, si fuéramos capaces, según él, de diseñarla muy bien, sin politizarla, como pasa con el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), del que ha dicho que está "muy politizado".

Por otro lado, ante una posible subida de tipos de interés, ha sostenido que "no nos vamos a hundir para siempre" pero, en su opinión, sería mejor que no la hubiera. El Banco Central Europeo es, a su juicio, un fenómeno de construcción de reputación y credibilidad, pero ahora tiene ya "un cierto sesgo".

En este sentido, ha explicado que aunque Alemania parezca que va relativamente bien, debería dejar actuar un poco más a los demás, ya que parece que use la subida de interés como "un cilicio" para alejar una tentación.

Solchaga, respecto al sistema financiero, ha reconocido los problemas de capitalización de las cajas de ahorro, en gran medida por la mora o los créditos fallidos. Y aunque ha apuntado que no es posible saber la evolución, ya que dependerá de la recuperación económica, ha considerado importante el mensaje lanzado por el Gobierno de que " no están dejadas de la mano de Dios y todas son solventes".

También ha considerado importante que si los trabajadores, mediante sus representantes, deciden hacer un convenio colectivo con la empresa, no tenga este que estar sometido obligatoriamente al general. A su juicio, si no se hace de esa forma, nos habremos equivocado otra vez, aunque ha dicho tener la impresión de que el Gobierno está dispuesto a ir por ese camino.

Preguntado por los 400.000 absentistas profesionales en el país según un estudio, ha apuntado que es cierto que hay un alto nivel de absentismo y que hay gente que con su comportamiento han hecho de esto su naturaleza.

Para él todo deriva de un problema de educación y ha incidido en que no se quiere hablar del descuido constante de los padres respecto a la educación de los hijos. A su juicio, la educación es un tema de vocación de los enseñantes y de responsabilidad de los padres.

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