Un estudio de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) de UGT muestra que cerca de un 30% de los profesores de Secundaria considera la falta de respaldo de los padres en los problemas disciplinares de sus hijos como el primer factor de estrés en su labor docente diaria.

Según explica en nota de prensa el secretario general de FETE-UGT en Cantabria, Fernando García, el estudio del sindicato, incluido en el proyecto de la Fundación de Riesgos Laborales 'Guía de buenas prácticas sobre el estrés en la enseñanza secundaria', se asienta en las encuestas realizadas a 1.125 docentes de toda España, 54 de ellos de 28 centros educativos de Cantabria, tanto públicos como privados o concertados.

García ha señalado que "un 29,6% de los profesores encuestados determinan la falta de colaboración de los padres como el principal foco de máxima tensión en su labor docente, aunque si se une a este porcentaje los que lo consideran de una importancia medio alta, casi un 55% de los encuestados lo confirman como el primer factor de estrés de su profesión".

"Si se analiza con detalle las respuestas de los encuestados en este primer factor de estrés en la enseñanza secundaria, son las mujeres y los docentes jóvenes de menos de 30 años los más proclives a considerarlo como de alto riesgo", apunta el sindicalista.

El estudio de FETE-UGT identifica otros cinco factores de primer nivel en el estrés del profesorado de enseñanza secundaria por debajo del anterior: el enseñar a personas que no valoran la educación, las aulas con excesivo número de estudiantes, las agresiones entre alumnos, las amenazas verbales de estos a sus docentes y las desconsideraciones hacia el profesor.

"Además de descubrir los principales factores que generan ansiedad en el profesorado, la investigación ha estudiado también lo que se conoce como el síndrome del quemado (burnout), que implica agotamiento emocional, despersonalización y una baja realización personal", subraya el secretario general de FETE-UGT.

García agrega que "la mayoría de los profesores encuestados en el estudio piensa que afronta las situaciones estresantes de forma correcta y que se encuentran más comprendidos por sus colegas de profesión que por sus familiares y amigos íntimos", tras matizar que "la postura de negación total, como si nada hubiera ocurrido, afecta prácticamente a uno de cada cuatro docentes".

Por encima del 40%

El estudio de UGT identifica los seis factores de más estrés mencionados porque todos ellos superan una puntuación media de un 40% de los encuestados a partir de los dos niveles máximos clasificados, el medio alto y el alto.

Así, al margen del primer factor relativo a la falta de colaboración y apoyo de los padres, las agresiones verbales de los alumnos a sus profesores, aunque es el cuarto en importancia por la puntuación media del estudio, es el segundo en el nivel máximo de estrés según un 28,8% de los docentes.

Por su parte, presenciar las agresiones entre los propios alumnos y el tener que impartir clase a un excesivo número de ellos representarían el tercer y cuarto mayor foco de tensión para más de una cuarta parte de los encuestados.

Por último, un 23,47% de los más de un millar de profesores de Secundaria encuestados sitúa las desconsideraciones de los alumnos como factor de estrés alto en su tarea profesional y un 23,2% lo hace en el tener que enseñar a personas que no valoran la educación, pese a que este último factor es el segundo en relevancia en la puntuación media de la distintas ponderaciones de la encuesta: bajo, medio bajo, medio, medio alto y alto.

En opinión del responsable regional de FETE-UGT, "este estudio proporciona una base muy útil para adentrarse en la forma que el profesorado trata de resolver los problemas y presiones a los que se encuentra sometido en su labor docente, desde fórmulas de autocrítica a mecanismos para liberar las emociones hasta la negación del problema o evitar el trato con la gente".