El Centre del Carme ha culminado después de dos años su IV fase de rehabilitación para convertirse en un espacio "multidisciplinar" que acogerá todo tipo de manifestaciones artísticas y culturales. El Refectorio, el Aula Capitular, el Dormitorio y el ala este del claustro renacentista del que fuera convento de los Carmelitas en el siglo XIII, se han recuperado como salas expositivas, de conferencias o incluso para programar conciertos.

La consellera de Cultura, Trini Miró, el secretario autonómico de Cultura, Rafa Miró, y el arquitecto responsable de la obra Julián Esteban Chapapría han visitado este viernes el recinto que se inaugurará este domingo con la exposición permanente 'Decor Carmeli. La Belleza del Carmen', una muestra que se quedará fija en el Aula Capitular para recordar toda la historia del edificio desde su construcción en el año 1280.

Con un presupuesto de 3,7 millones de euros —el 75% financiado por la Generalitat y el 25% por el Ministerio de Fomento a través del 1% cultural— se ha intervenido sobre una superficie de 1.590 metros cuadrados, —de los que 852 suponen un aumento de la superficie expositiva—, y se han tenido que hacer excavaciones que han hecho salir a la luz hallazgos como una vivienda islámica del siglo XII bajo sus cimientos, que ha sido restaurada hecha visible a través de un vidrio.

Junto a ella, calles de la misma época que permanecerán conservadas y enterradas, además del descubrimiento de una serie de féretros en una cripta ordenada por el Marqués de Castellfort en 1690, que se ha hecho accesible solo para expertos, o de un pavimento anterior al siglo XIII, el más antiguo que se ha visto nunca en Valencia.

En la planta baja, el Aula Capitular se ha convertido en una sala de 116m2 independiente que albergará una muestra permanente sobre la historia del monumento, mientras que el antiguo Refectorio es ahora una amplia sala de 306 m2. Además, se ha puesto en valor el acceso original desde el patio gótico que data del siglo XIII.

Arriba, en la primera planta, se ha actuado sobre el Dormitorio, una habitación con ocho siglos de historia, prácticamente los mismos que tiene el convento, y donde se ha cambiado toda la cubierta, antes formada cerchas metálicas y ahora sustituidas por armaduras de par y nudillo al modo medieval.

Con sus 430 m2, será una de las salas expositivas más amplias de la ciudad, que permanecerá abierta en todo momento, albergue o no exposición, para que se puedan admirar las pinturas que en su día adornaban las habitaciones de los monjes y que se han recuperado de sus paredes.

Después de esta rehabilitación, Miró espera en que el Centre del Carme se convierta en un espacio cultural "multidisciplinar" y "de referencia" tanto en la Comunitat como fuera de ella, que acoja "todo tipo de manifestaciones artísticas y culturales". Un "hervidero de cultura" que actúe como "reclamo" para los turistas y "legado" para las generaciones venideras.

Han sido unas obras no exentas de "dificultades", tanto por la "falta de calidad arquitectónica o constructiva" de la época, que ha requerido "operaciones de consolidación muy comprometidas", como por los trabajos que han sido necesarios para lograr las condiciones de climatización adecuadas para el cuidado de los bienes que se exhiban, ha señalado por su parte el arquitecto responsable.

Esteban Chapapría se ha mostrado "particularmente contento" con la intervención que, según ha explicado, ha recuperado "la parte más antigua del edificio". De hecho, "por primera vez se ve arquitectura anterior al siglo XV en Valencia, rescatada con un respeto realmente cuidadoso", ha asegurado. Además, ha quedado "todo resuelto desde el punto de vista de evacuaciones, de condiciones del edificio y de funcionalidad de cara a los usos" que se le vaya a dar, ha subrayado.

No obstante, "es un monumento inacabable" y "todavía no hemos terminado", ha advertido. Faltaría rehabilitar la parte norte y la parte oeste del claustro renacentista, pero en estos momentos se está "estudiando completar la restauración del edificio", ha avanzado el arquitecto, que confía en que "a la larga" sea "el edificio cultural de mayor trascendencia de la ciudad".