Según datos de la Sociedad Española de Fertilidad (SEF), 5.480 mujeres en España congelaron sus óvulos en 2020. Cifras que reflejan que cada vez son más las que apuestan por esta técnica médica que permite la conservación de ovocitos, las células germinales reproductivas femeninas, con el fin de preservar la fertilidad que les permita ser madres en algún momento.
Muchas de nosotras queremos avanzar en nuestras carreras, explorar el mundo, y simplemente, disfrutar de la vida antes de embarcarnos en la aventura de la maternidad. Pero, por otro lado, el famoso reloj biológico no se detiene, y las preocupaciones sobre la fertilidad siempre están al acecho.
Ahí es donde entra en juego la congelación de óvulos. Este proceso ofrece a las mujeres la oportunidad de tomar el control de su reloj biológico. Ya no estamos limitadas por el tic-tac implacable de ese reloj. Podemos decirle al tiempo: "Espera un poco".
¿Por qué se congelan los óvulos?
La Dra. Anabel Salazar, ginecóloga especialista en infertilidad y reproducción asistida, y directora de IVI Málaga, señala en una entrevista para Mujer.es que a partir de los 35 años, experimentamos un descenso significativo tanto en la cantidad como en la calidad de nuestros óvulos. Según la Dra. Salazar, el motivo principal por el que se suelen congelar los óvulos es de carácter personal y está estrechamente relacionado con la presión del reloj biológico y el deseo de alargar el tiempo para poder sentirse que está en un espacio y tiempo adecuado para la concepción.
"Vienen a preservar mujeres solteras, pero también vienen cada vez más mujeres en pareja con planes de futuro, pero que no se consideran con la seguridad suficiente como para realizarlo en ese momento", revela la experta.
"Tanto la reserva ovárica, como la edad de la mujer y el número de óvulos que finalmente consigamos vitrificar, nos va a dar un ratio de probabilidad de éxito en el futuro", explica la Dra. Salazar, que añade que según los resultados extraídos desde el 2017 en IVI, "con menos de 35 años somos capaces de congelar entre 10 y 12 ovocitos maduros, por lo que vamos a tener una probabilidad de tener un hijo con estos óvulos en torno al 85% de media".
¿Cuánto duran congelados los ovocitos?
La Dra. Anabel Salazar enfatiza que la duración del tiempo de congelación en sí misma no afecta negativamente la calidad de los óvulos. Lo crucial es que el proceso de congelación se realice adecuadamente en un centro que cumple con los estándares necesarios, garantizando así la máxima supervivencia de los óvulos. La tasa de supervivencia, sin embargo, está vinculada a la calidad y a la edad de la paciente. "La recomendación es hacerlo cuanto más joven, mejor, en torno a los 30 y no pasar de los 35 años, para tener las mejores tasas de éxito".
"En el caso de mujeres jóvenes y saludables, cuyos óvulos son comparables a los de donantes de alrededor de 25 años, la tasa de supervivencia se sitúa en torno al 95 o 96%. A medida que la mujer envejece, la tasa de supervivencia podría descender al 80 o al 85%", explica la experta en reproducción asistida. En su opinión, aunque no es lo idílico, congelar óvulos a los 38 años con una reserva de siete óvulos es preferible a posponerlo hasta los 40 años, cuando la cantidad y calidad de los óvulos pueden haber disminuido a tan solo uno.
¿Cómo es el procedimiento?
El procedimiento consiste en una estimulación ovárica con hormonas inyectables, según nos cuenta la especialista, el proceso es exactamente igual que el de una mujer que se va a realizar una fecundación in vitro, pero sin la fecundación. La Dra. Anabel Salazar destaca que en la actualidad, existen diversas opciones de hormonas disponibles para la estimulación ovárica, las cuales pueden ser administradas de manera autónoma por la paciente.
"Se hace la estimulación, que dura unos 10 o 12 días aproximadamente. Durante ese proceso de estimulación ovárica realizaremos un par de controles ecográficos para ver que como están creciendo los folículos y más o menos que respuesta estamos obteniendo, y después programamos la extracción o punción de los óvulos en quirófano", revela la Dra. Salazar, que hace hincapié en que es un procedimiento totalmente indoloro, pues la paciente va a estar dormida en todo momento y rápido, ya que no dura más de dos horas.
Según su experiencia, esta modalidad de tratamiento suele ser muy bien recibida por las pacientes. Además, aconseja que durante las dos o tres semanas que dure el proceso se evite la realización de ejercicios físicos intensos. "Después de la punción, la regla suele venir a los 5-7 días y a partir de ahí ya tendremos nuestro ciclo menstrual normal".
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