Uno de los mayores problemas que pueden ocurrirle a nuestro vehículo de cuatro ruedas es que el motor gripe y corra peligro inminente de rotura. Los usuarios de España tienen que tener en cuenta que el motor es un engranaje de piezas que está en continuo rozamiento y que puede provocar un desgaste y dilatación de las mismas, aumentando además la temperatura del motor.
Si no se controla dicha acción y desgaste mediante sistemas de lubricación y refrigeración, esta situación podría provocar la fusión de estos componentes metálicos agarrotando y bloqueando su movilidad, por lo que estaríamos enfrentándonos a un escenario real de motor gripado.
Concretamente, esta avería suele ocurrir en la zona entre el pistón y la camisa alta del cilindro, que es donde las temperaturas están más altas. Es importante recordar que un buen mantenimiento de nuestro vehículo puede salvarnos de este grave problema que puede ser provocado por diferentes causas que a continuación os detallaremos.
¿Cuáles son las causas para que un motor gripe?
1.- Falta de lubricación
Como ya hemos comentado anteriormente, lubricar las diferentes piezas y elementos del motor es fundamental para evitar que el motor gripe. Mantener un nivel correcto de aceite provocará la correcta lubricación de las piezas y, además, será el responsable de evacuar calor de la zona del motor. Por ello, es muy importante comprobar los niveles de aceite periódicamente, siempre y cuando esté el motor frío y el vehículo estacionado en una superficie llana.
2.- Fallo en la refrigeración
El líquido refrigerante, tal y como ocurre con el aceite, es un elemento fundamental para rebajar las altas temperaturas que existen en el motor. Por ello, es muy importante mantener el nivel de este producto. De lo contrario, estarás alterando el correcto funcionamiento del motor, que puede llegar a gripar en cualquier momento.
3.- Desequilibrio entre el cigüeñal y las bielas
Si nos encontramos ante un cigüeñal mal equilibrado, este podría dar lugar a una serie de vibraciones y rozaduras con desgastes irregulares, además de provocar un calor más intenso que provocará, en el peor de los casos, el gripado del motor.
¿Cómo podemos evitar que gripe el motor?
Tal y como hemos apuntado en los párrafos iniciales, un correcto mantenimiento de nuestro vehículo ayudará a que el motor de nuestro coche se encuentre 'sano' durante bastante tiempo. Es fundamental que el sistema de lubricación se encuentre en unos niveles óptimos para que el rozamiento de las piezas y elementos que conforman el motor del coche no tengan ningún tipo de error durante su funcionamiento.
¿Cuánto cuesta arreglar un motor gripado?
Los usuarios españoles, a pesar de seguir las indicaciones marcadas anteriormente en el mayor de los casos, no pueden evitar enfrentarse a una situación que generará más de un 'dolor de cabeza' y 'de bolsillo'. El coche, ante el gripado de su motor, perderá potencia, la velocidad disminuirá y escucharemos distintos ruidos mecánicos que provendrán del motor. Si identificamos este tipo de escenario, el consejo más recomendable sería inmovilizar el coche y acudir a nuestro taller de confianza.
Si nuestro mecánico nos confirma las malas noticias, existen dos situaciones: reparar el motor o sustituirlo por uno nuevo. La primera opción es la más lenta y cara, ya que se tendrá que localizar el punto exacto donde se ha producido el fallo mecánico y, posteriormente, sustituir las piezas afectadas. En condiciones normales y para un vehículo de gama media, el precio medio para reparar un motor gripado es de 1.600 euros, aunque esta cifra puede variar dependiendo de la marca y modelo del coche y en función de la cilindrada del motor.
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