La Asociación Española de Consumidores ha emitido una advertencia sobre un reciente intento de fraude electrónico que está afectando a numerosos ciudadanos. La estafa implica el envío de mensajes de texto (SMS) que informan a los destinatarios sobre una multa impagada de 35 euros emitida por la Dirección General de Tráfico (DGT). El mensaje amenaza con aumentar la multa en 24 horas si no se realiza el pago a través de un enlace proporcionado.
La falsedad de las multas vía SMS
Según la Asociación Española de Consumidores, este mensaje SMS es parte de un nuevo fraude que juega con la urgencia percibida y el estado de tensión de quienes lo reciben. Aunque el mensaje parezca genuino, la organización destaca que no representa una sanción real de la DGT.
En lugar de seguir los procedimientos habituales de notificación de multas, que implican notificaciones escritas enviadas al domicilio del infractor o a través de notificaciones electrónicas para aquellos con certificado digital activado, los estafadores buscan aprovechar la inmediatez del SMS para presionar a las personas a realizar pagos sin verificar la autenticidad de la multa.
Procedimientos legítimos de notificación de multas
Es importante destacar que la DGT no utiliza mensajes SMS para exigir pagos ni alerta sobre las consecuencias de no pagar multas de tráfico. La forma legítima de notificación es a través de correo postal o la Dirección Electrónica Vial, como confirma la DGT. Cualquier mensaje de texto que solicite un pago inmediato a través de un enlace debe ser tratado con escepticismo y verificado antes de realizar cualquier acción.
Prevención y reconocimiento de fraudes
Esta estafa se suma a una serie de fraudes que utilizan el nombre de la DGT para engañar a las personas. Los ciberdelincuentes a menudo emplean tácticas de phishing, aprovechando la confianza en instituciones reconocidas para robar datos personales o incluso dinero.
Para evitar caer en estas estafas, se aconseja no hacer clic en enlaces ni descargar documentos de mensajes sospechosos. Se debe verificar la dirección de envío para asegurarse de su autenticidad y prestar atención a cualquier palabra o frase inusual.
La conciencia y la precaución son clave para protegerse contra estas amenazas en línea. En caso de duda, es recomendable contactar directamente con la DGT para confirmar la legitimidad de cualquier comunicación recibida.
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