El sindicato FSP-UGT ha denunciado este miércoles el cierre de 16 centros de atención a drogodependencias y el despido de un tercio de la plantilla en el pasado año como consecuencia de la "nefasta" gestión de la Conselleria de Sanidad mientras que, por contra, el paro ha aumentado la demanda de tratamiento por abuso de alcohol y de cannabis, mientras el tiempo de espera para el ingreso en centro se ha "duplicado" al haber menos centros.

Así lo ha indicado en un comunicado en el que atribuye la situación a "las condiciones de la macrolicitación realizada por la Conselleria a finales de 2011 para la contratación de plazas en estos centros". Según el sindicato, Sanidad "definió unos lotes tan amplios e inalcanzables para la mayoría de las ONG que dejó fuera a todas las entidades pequeñas surgidas históricamente de la iniciativa social, al serles imposible económicamente disponer de tanto dinero" para presentarse.

La FSP-UGT denuncia que el resultado ha sido que en el año 2012 "han cerrado 16 centros (entre viviendas, centros de día y comunidades terapéuticas), se ha despedido a la tercera parte de la plantilla (más de 80 trabajadores) y la Conselleria de Sanidad ha reducido en un tercio el número de plazas públicas disponibles para la atención a las personas con trastornos adictivos".

Según sus datos, el número de plazas públicas en Centros de Día ha bajado de 1.200 a 700 mientras que en Viviendas de Tratamiento y de Inserción se ha recortado de 100 a 22 plazas. Además, añade que la política de la Conselleria de Sanidad ha cerrado nueve centros de día, de los que tres están en Valencia (de las entidades Avant, Asociación Valenciana de Ayuda a Personas Excluidas -AVAPE- y Fundación Aprovat); uno en Castellón (Fundación PATIM); uno en Alicante y uno en Elche (Proyecto Hombre); uno en Torrent (Asociación de Alcohólicos Rehabilitados de Torrent y Comarca, Artic) y uno en Alcoi y uno en Alzira (Fundación para el Análisis, Estudio y Prevención de las Adicciones, AEPA).

El sindicato apunta que esto ha supuesto "la pérdida de más de 500 plazas existentes en 2010" y que el número de plazas públicas en Centros de Día haya bajado "a poco más de 700 en 2013". Además, estos cierres "han implicado el despido de unos 45 trabajadores", según FSP-UGT.

Del mismo modo, ha denunciado el cierre de 12 de las 15 Viviendas de Tratamiento y de Inserción existentes en 2010, con lo que el número de plazas públicas ha pasado de 100 a 22, y "ha dejado sin cobertura a la provincia de Alicante, que no dispone de ninguna Vivienda, cuando era la provincia que más plazas tenía de la Comunitat Valenciana". Los cierres han afectado a las Viviendas de AEPA, de la Fundación Noray, de la Associació Mosaic y de la Associació Casa Oberta.

Esta última entidad renunció al contrato de las cuatro Viviendas que tenía "ante los prolongados retrasos en los pagos de la Conselleria de Sanidad", lo que ha supuesto el despido de otros 27 trabajadores. En el caso de las comunidades terapéuticas, asegura que también se han visto afectada ya que en 2010 la Conselleria de Sanidad tenía plazas públicas en ocho y en la actualidad ha perdido las plazas contratadas con cuatro de estos centros.

Retrasos para ingresos

Según el sindicato, como consecuencia de esta pérdida de plazas públicas "las listas de espera han aumentado y el tiempo de espera para ingresar en una comunidad terapéutica ahora es de tres a cinco meses" cuando en 2010 era de 30 a 45 días), mientras que el ingreso en un Centro de Día se retrasa entre uno y dos meses (más del doble que en 2010).

La FSP-UGT lamenta que estos "recortes" se producen "en un momento en que los efectos de la crisis y de la elevada tasa de paro han aumentado las demandas de tratamiento por abuso de alcohol". De hecho, apunta que el 90 por ciento de los pacientes adictos admitidos a tratamiento en Centros de Día y en Comunidades terapéuticas están en paro.

El sindicato subraya que la crisis "está generando una importante bolsa de personas que demandan atención por drogodependencias formada por parados de 50 años o más y en su mayoría con cargas familiares, lo que agrava la repercusión social de esta falta de recursos para la atención en drogodependencias". La FSP-UGT denuncia que el PP "abandona a la población que necesita ayuda precisamente cuando más requiere de la protección social" y considera "injusto que los recortes se ceben en las personas en dificultades derivadas de estar en paro".

El sindicato también recalca que existe "gran incertidumbre" ante la licitación de las plazas públicas para el próximo año, ya que a finales de 2013 finalizan los contratos vigentes y hay "dudas sobre la disponibilidad de dotación presupuestaria para la atención a drogodependencias y sobre las condiciones en que la Conselleria convocará los nuevos contratos".