Agentes de Policía Nacional y Policía Local han detenido la pasada noche en la Playa de Palma a una mujer, tras identificar a 13 mujeres de nacionalidad nigeriana que se dedicaban a robar a los turistas, tras ofrecerles servicios sexuales.

En un comunicado, la Jefatura Superior de Policía ha detallado que el arresto se ha producido por infracción a la Ley Orgánica sobre protección de los derechos y libertades de los ciudadanos extranjeros en España y su integración Social.

Por otro lado, ha explicado que las mujeres identificadas y la detenida se dedican al ejercicio de la prostitución en vía pública en la citada zona turística de esta ciudad y a la comisión de delitos de robo con violencia y hurtos en el mismo lugar, hechos que se realizan sobre turistas habitualmente con sintomatología de ingesta alcohólica.

Así, ha recordado que por parte de la Policía se vienen realizando "incesantes" investigaciones sobre estos grupos, "bien organizados", desde que comenzó la temporada turística, habiéndose comprobado que la mayoría de estas mujeres tienen permisos de residencia como familiares de residentes comunitarios, permisos que los investigadores atribuyen a la obtención de los mismos a través de matrimonios de conveniencia, también conocidos como matrimonios blancos "o más fácil aún a través de su inscripción en los registros como parejas de hecho".

La Policía Nacional ha destacado que las mujeres investigadas actúan "casi como comandos", situadas en puntos estratégicos -los de paso de los turistas hacia sus hoteles-, de forma que observan a sus víctimas y seleccionan a las que reúnen ciertas características y, a continuación, las abordan, las someten a tocamientos hasta que estos acceden a mantener relaciones o si se niegan o están muy bebidos les sustraen sus efectos mediante hurtos o robos con violencia si es preciso.

Así, ha recalcado que los perjudicados nunca reconocerán a sus agresoras por diversas razones, entre las que ha citado el exceso de alcohol, oscuridad y "el mimetismo que éstas adoptan con el entorno".

Por otra parte, ha recordado que en bastantes ocasiones, estas mujeres son víctimas de la trata de seres humanos para la explotación sexual, debiendo abonar cada una de ellas a las organizaciones que las explotan una media de 40.000 euros.

En esta línea, ha revelado que las investigaciones practicadas por el momento han llevado también a la desarticulación de varias de estas redes, habiendo sido liberadas varias de ellas, entre las que se encontraban dos menores.