El Parlament ha leído este martes una declaración institucional sobre la situación del sector de la discapacidad, a propuesta del Comité de Entidades de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi Baleares), con la que ha remarcado la labor que desempeñan las asociaciones en este ámbito y ha defendido la importancia de "agilizar los pagos" a estas entidades.

La declaración, que se ha realizado ante, entre muchos otros, el presidente del Cermi Baleares, Ramón Salas, ha sido pronunciada por la secretaria primera de la Cámara, Eulàlia Llufriu, quien ha remarcado que el desarrollo del movimiento asociativo de la discapacidad en las islas ha sido "muy importante", y se ha convertido en una de las "fortalezas" de la sociedad balear, distinguiéndola como "una sociedad madura capaz de dar respuestas".

Asimismo, ha resaltado que, a pesar de las numerosas reivindicaciones del sector que no han sido resueltas, las entidades de la discapacidad han conseguido, "con mucho esfuerzo y el apoyo de toda la comunidad, hacer una red asistencial para dar respuesta a las necesidades más básicas".

Según se ha expuesto en la declaración, el trabajo de proximidad, el conocimiento exhaustivo de las necesidades de las personas atendidas y, sobre todo, la perspectiva comunitaria, dan al tejido asociativo una posición privilegiada para ofrecer servicios flexibles y adaptados a la complejidad de las necesidades sociales actuales y para afrontar "con valentía" los retos emergentes que hacen frente a las sociedades occidentales.

En este sentido, se ha hecho referencia a la eficiente gestión de recursos que permite una optimización "máxima" de éstos, y a la integración social y laboral de las personas con discapacidad. Asimismo, ha expuesto diferentes avances legislativos conseguidos.

Además, la declaración aludía a la "difícil" situación económica, que afecta al sector de la discapacidad, por lo que, según ha indicado, para 2013 "es prioritario" garantizar el derecho que tienen las personas con discapacidad a disfrutar de servicios de atención socio-sanitaria, de recursos asistenciales, de programas formativos y de inserción social.

Por otra parte, el Parlament ha reconocido al sector de la discapacidad como un "aliado estratégico" para frenar los efectos de la crisis a los sectores sociales más sensibles y como un "instrumento necesario" para luchar contra la fractura social.

Al mismo tiempo, se ha comprometido a crear las condiciones adecuadas para cumplir con principios básicos reconocidos como la no discriminación, la vida independiente, la normalización, el respeto a la diversidad, la igualdad de oportunidades, la accesibilidad universal, el diseño para todos, la participación, o la transversalidad.

El Cermi está integrado en Baleares por seis federaciones que agrupan a 57 entidades y que trabajan para cerca de 7.500 personas con distintas discapacidades (física, orgánica, intelectual, auditiva, visual y discapacidad por enfermedad mental), gracias al trabajo de 2.200 profesionales, 7.000 socios y 400 voluntarios.