Epidemia española en Bercy: cuatro derrotas de cuatro

  • Verdasco abandona ante Sam Querrey en media hora.
  • Daniel Gimeno-Traver no puede con Llodra.
  • Guillermo García López y Roberto Bautista-Agut hacen lo propio.
El español Fernando Verdasco devuelve la pelota.
El español Fernando Verdasco devuelve la pelota.
EFE
El español Fernando Verdasco devuelve la pelota.

Cuatro derrotas españolas de cuatro participantes se han producido en la segunda jornada del Masters 1.000 de París-Bercy, que acabó con las esperanzas de Fernando Verdasco, lesionado en el cuello, y de los clasificados Guillermo García López, Roberto Bautista-Agut y Daniel Gimeno-Traver.

A la espera de que entren en juego David Ferrer y Nicolás Almagro, las dos principales bazas españolas en el último Másters 1.000 del año, la participación de la armada no está siendo muy provechosa

Las cuatro derrotas se suman a las eliminaciones, la víspera, de Pablo Andújar y de Feliciano López, que se inclinó ante el también español Albert Ramos, que ahora se medirá contra Almagro.

Ramos fue el único superviviente junto con Marcel Granollers, que se impuso al ruso Mijail Youzhny por 6-4, 6-3. Su próximo rival será Ferrer.

En el mejor de los casos, habrá dos españoles en octavos.

Verdasco era quien, a priori, más opciones tenía de clasificación, aunque enfrente tuviera a un rival tan correoso como el estadounidense Sam Querrey, 23 del mundo, dos puestos por delante del madrileño.

Programado en la pista secundaria del Omnisport de París, el encuentro careció de entidad, porque los problemas en el cuello atenazaron a Verdasco, que apenas dio batalla en la primera manga, que cedió por 6-1, y que abandonó cuando el marcador indicaba empate 1-1 en la segunda, media hora después de haber comenzado.

Verdasco no podrá así medir sus fuerzas contra el futuro número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, que será el rival de Querrey.

Bautista-Agut opone resistencia

El español que más pelea puso en el campo fue Bautista-Agut, que había sobrevivido de la fase previa y que tenía enfrente a un rival en forma ascendente, el francés Paul-Henri Mathieu, invitado por los organizadores y adoptado por el público.

El partido, a priori desigual a favor del galo, se jugó de poder a poder y el español lo perdió por su menor experiencia, que se notó sobre todo en los puntos decisivos.

En la primera manga, el alsaciano rompió el servicio de su rival en el noveno juego y se hizo con el set. El partido parecía insípido, sin historia, tras algo más de hora y media de juego.

Pero el segundo set reveló un gran espectáculo. Bautista-Agut se adelantó 4-1 en el marcador y la reacción de Mathieu, muy sustentado por el público, le permitió sumar cinco juegos consecutivos y colocarse en una posición ideal para cerrar el partido, con servicio a su favor.

En ese momento, la moral del francés, que hacía tres años que no pisaba Bercy, una pista en la que dejó escapar una final de Copa Davis contra Youzhny, se vino abajo.

Bautista-Agut se colocó 0-40 y Mathieu volvió remontar y forzó la igualdad. El francés desperdició hasta seis bolas de partido, dos de ellas con doble falta. Y salvó once puntos de ruptura antes de acabar por ceder su servicio en un juego que duró más de 27 minutos.

El español, que en ese momento tenía la ventaja moral del encuentro, disputó el juego eterno con una zapatilla rota, que tuvo que cambiarse tras el intercambio.

Una mudanza que no le trajo suerte, pues tras la cual volvió a ceder su servicio, ante un agresivo Mathieu, que ganó 21 puntos en la red.

Bautista-Agut, 82 del mundo, rozó la sorpresa ante un jugador que ha estado más de un año alejado de las pistas por problemas en su rodilla y que ha regresado a las pistas donde parece volver a encontrar el nivel de juego que le llevó a ser número 12 del mundo.

Desde su retorno en enero, Mathieu, de 30 años, ha ido escalado posiciones y la semana pasada en Basilea cayó en semifinales contra el suizo Roger Federer.

El francés deberá probar esa recuperación en segunda ronda, donde se medirá contra el escocés Andy Murray, tercer cabeza de serie.

Menos oposición presentó Guillermo García López, minado por problemas en la espalda en su duelo contra el también francés Jeremy Chardy y que acabó cediendo por 6-0 y 6-3.

Tampoco tuvo muchas opciones Daniel Gimeno-Traver en el tercer duelo franco-español. El jugador español, que se había quedado a las puertas de entrar en el cuadro final por la fase de clasificación, fue repescado a última hora para colmar el hueco dejado por la ausencia del checo Radek Stepanek, lesionado en la rodilla derecha.

Gimeno-Traver cayó contra Michaël Llodra por 7-5 y 6-3 en poco más de una hora de juego.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento