El secretario general de UGT, Lorenzo Bravo, se ha "solidarizado" con los cerca de sesenta estudiantes de la asamblea universitaria de la UIB que este martes ocuparon la Conselleria de Educación, Cultura y Universidades y de los cuales una veintena llegó a entrar en el despacho del conseller, Rafael Bosch, produciéndose momentos de tensión entre los jóvenes y el personal de este departamento.

Durante la concentración frente a la Delegación del Gobierno en contra de la reforma laboral y a la que han asistido unas 200 personas, Bravo ha precisado que él no está a favor de la violencia, pero "sí que hay que ocupar", teniendo en cuenta que "ellos nos están robando y cada vez nos envían a más policías para pegarnos".

"El delegado del Gobierno, José María Rodríguez, dice que se le está acabando la paciencia y será la suya porque la nuestra, la de los parados de larga duración, la de los jóvenes, la de los trabajadores y usuarios de la educación y la sanidad hace tiempo que se nos ha agotado", ha recalcado.

En este sentido, el dirigente sindical ha señalado que "nos sobran motivos para la indignación", por lo que ha dicho que le parece "muy bien" que al presidente del Govern, José Ramón Bauzá, lo reciban "a grito pelado" en los actos a los que asiste, ya que, en su opinión, "hay que seguirle como el hombre del frac".

"Si no se calma la situación, los sindicatos hasta cierto punto podremos controlar a un sector de la población, pero habrá otro que salga al margen de los sindicatos y habrá grandes revueltas en este país si siguen por este camino, ya que es una auténtica vergüenza que con las urnas se salten la democracia a la torera", ha señalado Bravo.

De este modo, el secretario general de UGT ha abogado por "luchar" para lograr un país "más moderno" en el que la educación sea "pública" para que los estudiantes sean "libre pensantes y como ahora que parece que los llevamos como borregos a que les metan ideología pura".

"nos sobran motivos para la indignación"

Bravo ha recalcado que "nos sobran motivos para la indignación" y ha pedido al Gobierno que tenga "paciencia", ya que para solucionar la actual situación "y que se nos quite la mala leche lo único que tienen que hacer para que no vaya a mayores es que nos llamen, debido a que queremos un pacto para la negociación colectiva y que les metan mano a los grupos financieros"

Por ello, ha pedido a Rodríguez que "mida sus palabras", ya que "parecía que era el más sensato, pero se le está yendo la olla" al asegurar que se le está acabando la paciencia ante los últimos incidentes ocurridos en Mallorca.