El jefe del Grupo de Homicidios de la Policía Nacional ha asegurado este martes que la principal testigo del crimen de Francisco José Guerrero, de 23 años y que falleció tras recibir una puñalada en un botellón celebrado en Sevilla el 25 de marzo de 2011 con motivo de la Fiesta de la Primavera, identificó en su primera declaración al acusado, Óscar Riquelme, como el autor del crimen.

Durante la tercera sesión del juicio con jurado popular que se está celebrando en la Audiencia Provincial de Sevilla, el responsable policial ha subrayado que la testigo protegido —que este lunes dudó y no identificó al acusado como el autor de la puñalada mortal— "aportó el nombre de pila" del acusado y "vio con toda claridad cómo le asestaba una o dos puñaladas a un chico que cayó al suelo".

De este modo, ha señalado que la testigo protegido "declaró bien y dijo que vio a dos chicos que se llamaban entre ellos Óscar y Lear —en referencia al menor de edad que estuvo inicialmente imputado por estos hechos—", y que fue del primero de ellos, al que definió como una persona "gruesa", de donde partió "el golpe de la navaja", aunque no pudo detallar si fueron unos o dos golpes.

Tras subrayar que esta testigo "aportó la certeza sobre el autor" del crimen, ha señalado que la misma "tenía miedo a declarar y a que se le pudiera identificar porque pensaba que el acusado era una persona agresiva". Cuando procedieron a la detención del imputado, éste "estaba tranquilo, como el que está esperando a que lo detengan".

"vaya marrón en que me ha metido el gordo'

El jefe del Grupo de Homicidios también ha hecho mención a la declaración de otro testigo que fue fundamental en la investigación, Rubén B., que señaló en su declaración policial "que vio junto a Francisco José a una persona gorda" y que ésta "fue la última a la que vio con la navaja en la mano".

Asimismo, ha asegurado que, cuando el menor que estuvo imputado por estos hechos era trasladado a dependencias policiales, "le dijo a dos policías 'vaya marrón en que me ha metido el gordo'" y que éste "llevaba la navaja y la tiró al río". Cabe destacar que, en la jornada de este miércoles, será precisamente el menor quien preste declaración como testigo en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial.

Otro policía ha relatado que, tras ser avisado por el 112, llegó al lugar de los hechos y vio "mucha gente, peleas y un gran alboroto", así como a muchas personas "que le decían que el autor del apuñalamiento era de San Juan de Aznalfarache". Según ha descrito, el 'botellón' "era una locura y un auténtico descontrol".

Por último, un tercer agente ha coincidido con su compañero en señalar que el 'botellón' "estaba desbordado, había entre 2.000 y 3.000 personas borrachas y consumiendo estupefacientes", y ha añadido que, en un momento dado, "le llegó un chaval al que habían dado un botellazo en la cabeza". Este joven le dijo que "los mismos que le habían dado el botellazo acompañaban a uno que había dado la puñalada".