Una decena de personas de Mallorca que cuida de sus familiares ancianos ha dejado a éstos en una de las residencias del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) mediante el programa 'Respiro familiar' con el objetivo, así, de poder disponer de un periodo de descanso.

Así han informado fuentes del IMAS a Europa Press basándose en cifras del primer semestre de 2011, que han detallado que el plazo máximo para que estas personas estén en las residencias es de un mes durante todo el año. Además, para que se lleve a cabo es necesario que se dé el consentimiento por parte de todas las partes implicadas -usuario, familia y administración-.

Por otra parte, han señalado que existen otros programas ofrecidos por el servicio de estancias temporales del Instituto como son el de convalecencia, el alojamiento temporal y la desatención temporal.

Así, por convalecencia han registrado nueve peticiones durante los primeros seis meses del 2011, de los cuales seis han sido para los usuarios y tres para los propios cuidadores.

Este programa se dirige a las personas -usuarios y cuidadores- que presentan temporalmente unas necesidades de cuidados especiales a raíz de, por ejemplo, una operación. Así, el tiempo máximo que pueden estar es de dos meses, si bien el IMAS puede estudiar una ampliación en función de los casos.

Por otra parte, el destinado a las personas con necesidades de alojamiento o desatención temporal por motivos sobrevenidos como puede ser un derribo de una vivienda o un desalojo se han acogido seis y una persona, respectivamente, durante un periodo máximo de dos meses. No obstante, este programa se trata de un recurso intermedio para cuando se busca una solución de alojamiento.

Para acceder a una estancia temporal el procedimiento que se debe seguir es solicitar una entrevista con el trabajador social de referencia, que será quien rellene la solicitud pertinente y justifique la necesidad del servicio de ingreso temporal.