Los lémures y osos de Terra Natura Murcia se alimentan de helados de fruta para refrescarse y soportar el calor

Los cuidadores del parque de naturaleza y animales Terra Natura Murcia preparan cada día helados de fruta para dárselos a los lémures de cola anillada ('Lemur catta') y a los osos ibéricos ('Ursus arctos') que habitan en las instalaciones del complejo murciano para combatir el calor estival.

Los cuidadores del parque de naturaleza y animales Terra Natura Murcia preparan cada día helados de fruta para dárselos a los lémures de cola anillada ('Lemur catta') y a los osos ibéricos ('Ursus arctos') que habitan en las instalaciones del complejo murciano para combatir el calor estival.

Ambas especies se alimentan durante este periodo de los helados que les permiten refrescarse a la vez que se alimentan, según ha informado el complejo murciano en un comunicado.

Las manzanas, peras, sandias y pasas se convierten en un helado, que además de contribuir a soportar las elevadas temperaturas de mejor manera, también supone un elemento de distracción y entretenimiento para estos animales.

Para ello, los expertos del parque vierten los trozos de fruta en botellas de agua de plástico, cortadas previamente por la parte del embudo. De ahí, se extraen dos tipos de moldes distintos para elaborar los polos.

Una vez añadida la fruta se añade agua al recipiente y se congela en una nevera. El molde de menor tamaño se reserva para los lémures y el más grande para los osos, cuyos helados suelen contener alimentos como pera, manzana, sandía, entre otros.

A la hora de suministrar los polos se retira el plástico del bloque de hielo para que solo quede la parte comestible. Ambas especies pasan los minutos degustando este postre gélido.

Y es que, las acusadas temperaturas del verano provocan que algunos animales modifiquen su actividad. En los hipopótamos, los osos o algunas aves de Terra Natura Murcia resulta frecuente observar ese cambio en su conducta durante este periodo.

En el caso de estos animales para afrontar el calor, por ejemplo, aumentan el tiempo que pasan dentro de sus charcas y disminuyen su actividad normal en las horas centrales del día, momento en el que mayor incidencia tiene el efecto del sol.

A pesar de que la dieta de los animales no varía sustancialmente, los cuidadores del complejo tratan de aportar una mayor cantidad de fruta de temporada que tiene mayor contenido en agua, entre las que destacan sandías, melocotones y melones.

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