Un grupo de jóvenes se proponía colarse en una vieja casa abandonada de Houston (Texas) para fumar marihuana y su plan se vio frustrado cuando, al entrar, se toparon con un tigre.

Cuando llamaron a la policía les costó convencer al agente que les atendió al teléfono, que pensó que estaban bajo los efectos de las drogas, cuenta CNN en Español.

"Les preguntamos si estaban bajo los efectos de las drogas o si realmente vieron un tigre", contó el sargento Jason Alderete, de la Unidad para atender la Crueldad contra Animales del Departamento de policía de la ciudad.

La voz titubeante y nerviosa del ciudadano al teléfono daba pie a dudas y los agentes no terminaron de creerse la historia hasta que llegaron al lugar y vieron al tigre enjaulado en el garaje de la casa.

Junto al animal encontraron varios paquetes de carne, a pesar de que la vivienda llevaba abandonada bastante tiempo. Se utilizaron tranquilizantes para dormir al felino y poder sacarlo con una grúa que lo trasladó al refugio de animales.

El origen del tigre y de los paquetes de carne está siendo investigado.