Catherine Navarro, una mujer de 34 años originaria de Nueva Jersey (EE UU), organizó una gran fiesta de divorcio después de un duro proceso de separación que ha tardado varios años en concretarse.

En el evento, al que asistieron cerca de treinta invitados, tuvo de todo, tal y como informa el Daily Mail. Tarta, globos -con lemas como 'felizmente divorciados'-, champagne y un sinfín de detalles para hacer de ese día uno de los más especiales de su vida.

La ocasión no era para menos. Navarro tenía solo 20 años cuando se casó con el que era su pareja, de nombre Marc, el 13 de mayo de 2005 en Nueva York.

Desafortunadamente, y como pasa muchas veces, la relación no fue a buen puerto y, siete años después, en 2012, ella decidió solicitar el divorcio a su marido.

Este se negó e, incluso, desapareció. Motivo por el que ha estado siete años luchando por lograr lo que ella tanto soñaba. Por fin, el 18 de marzo de 2019, la americana obtuvo sus papeles de divorcio.

"¡Estaba tan emocionada de finalmente recuperar mi apellido de soltera y deshacerme de él!", expresó al dairio británico.

"Decidí que era hora de celebrar la ocasión con una fiesta increíble para festejar mi nuevo comienzo!", aseguró Catherine. "Me sentí como si tuviera 20 años otra vez y tuviera una nueva oportunidad en el amor", sentenció.

"Definitivamente, recomendaría una fiesta de divorcio a cualquier otra persona si es una ocasión feliz que trae alegría, en lugar de recurrir a viejos recuerdos", agregó.