En las relaciones entre alumnos y profesores, es normal en estas fechas navideñas que algunos de los estudiantes hagan regalos a sus profesores: tazas, dulces, calcetines... Cualquier detalle para agradecerles el trabajo durante todo el año.

En este contexto, la historia de la profesora Rachel Uretsky-Pratt y su alumno, que tuvo que pensar mucho qué regalarle a su maestra ya que no tenía nada que ofrecerla, ya ha dado la vuelta al mundo a través de las redes sociales.

Pratt compartió en su cuenta de Facebook cómo su pequeño aprendiz le hizo un detalle muy dulce: "Hoy fue el último día antes de las vacaciones de invierno. Tendremos dos semanas de descanso con nuestras familias y seres queridos y luego regresaremos a la escuela", comenzó su publicación.

"En estas fechas la mayoría de maestros llevan algo a sus alumnos, como libros o pequeños bocadillos y, en ocasiones, reciben algo de sus estudiantes. A mí me trajeron unos chocolates, dulces hechos a mano, algunas joyas... pero estos malvaviscos (marshmallows) de los cereales Lucky Chram han sido lo mejor", confiesa la profesora.

Uno de sus alumnos, como no tenía dinero para comprar un regalo a su profesora, decidió separar los malvaviscos que incluyen los cereales que desayuna a diario en la escuela, los envolvió en el paquete de plástico donde le dan los cubiertos en el comedor y le llevó el presente a Rachel, que no pudo esconder su sonrisa y sorpresa ante tal detalle.

"Este alumno decidió sacrificar parte de su desayuno diario para traérmelo a mí", afirma la profesora en Facebook.

Las palabras de Rachel ya han recibido más de 372.000 likes y ha sido compartida 125.000 veces.