Gana la demanda a su empresa tras no invitarla a la fiesta de Navidad por estar de baja maternal

  • La madre ha sido indemnizada con 9.000 libras (casi 10.000 euros) por "dañar sus sentimientos".
Mujer embarazada
Un mujer embarazada.
EUROPA PRESS - Archivo
Mujer embarazada

Una madre ha sido indemnizada con 9.000 libras (unos 10.000 euros) después de demandar a su empresa por no invitarla a la fiesta de Navidad del trabajo mientras estaba de baja por maternidad. 

Según informan medios británicos, el tribunal de Croydon, al sur de Londres, dictaminó recientemente que Catriona Howie fue olvidada por sus jefes, que no contaron con ella para este evento mientras se encontraba de baja por cuidar a su bebé. 

Así, dictaminó que la la señora Howie tiene derecho a una compensación debido a que "dañaron sus sentimientos".

En ese tiempo, la trabajadora estaba fuera, al cuidado de su bebé, pero había trabajado para Holloways de Ludlow Design & Build Ltd como gerente general durante seis años.

Después de irse de baja por maternidad en julio de 2017 para tener a su hija Presley, Howie y la firma de diseños de cocinas acordaron que volvería a trabajar el verano siguiente.

La empresa, que tiene salas de exhibición en Londres, estaba pasando apuros económicos, según se contó en el tribunal. Así que los jefes decidieron no celebrar una fiesta navideña tradicional ese año, sino que organizaron una visita a un pub.

"La mayoría del personal con sede en Londres asistió", alegaron al tribunal. "Nadie invitó (a la señora Howie), pero aceptamos que fue un evento informal y con poca antelación y que no hubo invitaciones formales. "El personal fue informado por el boca en boca o por mensaje de texto", explicaron desde la empresa.

Sin embargo, la empleada afectada dijo en la audiencia que sentía que se estaba haciendo un esfuerzo consciente por parte de la empresa con el objetivo de hacerla sentir incómoda.

El tribunal dictaminó que Holloways también la había discriminado al ocultarle información sobre la situación financiera de la empresa y su probable despido, que finalmente se produjo poco después.

Así, el juez Ferguson dictó una compensación de entre 900 y 8.800 libras como una indemnización por "daño a los sentimientos", además de las 1.027 libras que se le ordenó pagar a la empresa por salarios no pagados y vacaciones.

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