El monumento a la coima, la escultura que un arquitecto habría colado en un edificio contra los sobornos en Argentina

Aunque ha pasado desaperciba durante años, la escultura situada en la fachada del antiguo Ministerio de Obras Públicas de Buenos Aires, en Argentina, ha saltado a la actualidad por su relación con los casos de corrupción y clientelismo con las contratas de obras en la Administración. Se conoce como el monumento a la coima, y muchos dicen que fue construido como una forma de denuncia.

La pieza decorativa ha pasado a formar parte de las guías de turismo oficiales por la historia que hay detrás de su construcción. Y es que, aunque no está confirmado, algunos historiadores y arquitectos aseguran que se ideó para criticar los sobornos, en Argentina conocidos como 'coimas', que abundaban en las concesiones de obra pública en el país durante los años 30.

La historia no aparece ni en el proyecto del edificio (que actualmente es el Ministerio de Salud), ni en los planos, ni en ningún archivo, pero se ha convertido en una historia inseparable de la escultura, que representa a un hombre que sostiene un maletín y que abre la palma de su mano para recibir la coima.

El Monumento a la coima fue ideado por el arquitecto Alberto Belgrano Blanco y construido por José Hortal, en aquel entonces director nacional de arquitectura. Es a este artista a quien se le atribuye la intención de denunciar los sobornos.

El edificio, construido en 1925 y situado en la Avenida 9 de julio, compitió en altura y majestuosidad con el Empire State de Nueva York (EE UU). En la actualidad, es conocido por la imagen de Eva Perón que fue instalada en 2010, tal y como ordenó la presidenta peronista Cristina Fernández de Kirchner.