Sea por salud; por respeto y empatía hacia la vida de los animales; por estar concienciado con el medioambiente; o por una moda popular, el panorama vegano en España está cambiando radicalmente. Hace 10 años podíamos encontrarnos -casi de forma anecdótica- algún restaurante completamente vegano entre las calles de Madrid. Sin embargo, en la última década, el aumento de personas que han adoptado una dieta sin consumo animal ha crecido hasta tal punto, que podemos encontrar locales de comida vegana en cualquier calle, barrio, o distrito. Lo que está claro es que han llegado pisando fuerte; su oferta gastronómica te deja con la boca abierta cuando entras a algún restaurante, y con la tripa llena y contenta cuando sales de él.
Por eso, te decimos cuáles son los mejores restaurantes veganos de Madrid para que alucines con sus platos y sabores. Toma nota y llama para reservar porque están siempre a tope.
Superchulo
Este local es uno de los más famosos de la capital, y no es para menos. Superchulo —gracias a su decoración— es una llamada a la tranquilidad que merecemos cuando vamos a comer a algún sitio.
Pero no solo es popular por su interiorismo, sino que son sus platos, llenos de colores y sabores, los responsables de que el restaurante esté todos los días lleno. En su carta destacan los Tenneessee Baos (con guiso estilo pulled pork, rúcula, alioli vegano, piña y cebolla encurtida); la Berenjena de Sichuan (asada a la parrilla de carbón con una salsa de cacahuetes al estilo japonés); o el Warm Curry (curry de coco y manzana con arroz negro, verduras asadas, mezcla de setas, cilantro y un chorrito de lima fresca).
Si con lo anterior todavía te lo estás pensando, sus postres te convencerán. El Bom Bom Brownie —tal y como lo describen en su web— es una verdadera locura que tienes que probar.
Precio aproximado por persona: 25 euros
Fuencarral 74
El Vegicano
Ya por su nombre, es difícil que no sepamos que tipo de comida se prepara en este local ubicado en el Mercado de Tirso de Molina. Lo has adivinado, en este local se puede disfrutar de una propuesta culinaria protagonizada por sabores de México que —en algunos platos— se funden con la gastronomía más internacional, dándole un toque original y divertido. Todo ello con el producto de temporada como eje principal de sus platos.
Si vas, te recomendamos —como entrante— el Humus Jalapeño con bastones de hortalizas o el Guacamolejo con totopos artesanales. De plato principal, los Tacos de cochinita pibil veganos son un acierto total; o el Curri amarillo de “secreto ibérico” hecho con soja, setas y sésamo. Elijas lo que elijas, vas a salir queriendo volver lo antes posible. Para terminar, te aconsejamos que no te vayas sin probar su —recién llegado— bizcocho de manzana con crema inglesa y frambuesa, es una locura para el paladar.
Precio aproximado por persona: 25 euros.
Mercado de Tirso de Molina, Doña Urraca, 15.
Pizzi & Dixie
Este local, ubicado en el corazón de Malasaña, es un sitio perfecto cuando tenemos antojo de comida italiana que sea 100% plant based. Su especialidad —nos da la pista su propio nombre— son las pizzas, aunque los platos de pasta vegana le siguen de cerca.
Las recetas de Pizzi & Dixie, dirigidas por el chef Rodrigo de la Calle, se caracterizan por sus ingredientes frescos, de calidad y cercanía, teniendo muy presente la sostenibilidad en la cocina. Además, versionan a la perfección la comida tradicional de Italia para ofrecer platos más divertidos y saludables.
Cuando vayas —porque tienes que ir— no puedes salir sin probar las Flores de Alcachofa con salsa de trufa; los Raviolis de Calabaza con cebolla caramelizada y salsa de salvia; o —la joya de la corona— la Pizza Dixie (con tomate San Marzano, mozzarella vegana artesanal, cebolleta confitada en crema balsámica, trigueros, rúcula, tomate seco…). Y para rematar esta brutal experiencia, la Tarta Ferrero Rocher con helado de avellana de Pink Albatross te dejará sin palabras.
Precio aproximado por persona: 35 euros
San Vicente Ferrer, 16.
La Oveja Negra
Este restaurante vegano va más allá de una experiencia gastronómica. El local tiene muy clara su historia y sus objetivos, y defienden una cocina llena de revolución, solidaridad, respeto y justicia social, donde todas las personas marginadas son bienvenidas.
Además, sus recetas son saludables, aptas para cualquier persona (gluten free), sostenibles y respetuosas con la vida animal. Aparte de deliciosas, eso es así. Su amplia carta pretende que todo el mundo pueda acercarse —poco a poco— al mundo vegano, sin agobiarse y sabiendo que existen muchísimas opciones en la cocina que están buenísimas y son muy nutritivas.
Tendrás que probar sus Tacos de Jackfruit a la barbacoa (con espinacas frescas, cilantro, cebolla, calabaza encurtidas y lima, acompañados de mazorca de maíz con salsa bbq casera y sin gluten); su Milanesa con salsa de tomate, queso y pesto (filete de legumbre empanado con salsa de tomate, queso vegano fundido y pesto de albahaca); sus croquetas caseras (varían los sabores durante la semana); o —de postre— su Cheesfake (anacardos con base de galleta y mermelada casera, sin gluten).
Precio aproximado por persona: 25 euros (carta), 12 euros (menú del día).
Buenavista, 42.
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