Ya sea de ternera o de cerdo, el solomillo es un ingrediente de lo más socorrido. En salsa, a la plancha, al vino, al horno... no hay receta que se le resista. Carne versátil, suave y fácil de comer, o sea, perfecta si a la mesa hay peques.
Pocas cosas más limpias y sencillas que la recetas al horno. Además, es la mejor opción si se trata de aprovechar la calidad de la materia prima. Si tenemos un solomillo de ternera, sin duda, pero también si es uno de cerdo.
Esta vez lo marinamos para añadirle sabores y aromas, que luego vamos a notar cuando salga del horno. Lo acompañamos con las humildes pero siempre ricas patatas.
Solomillo marinado al horno con patatas
Ingredientes
Solomillo de cerdo (2)
Patatas (4)
Cebolla (1)
Vino blanco (un vaso)
Pimienta
Aceite de oliva
Sal
Para el marinado:
Perejil fresco
Pimienta negra
Limón (1)
Miel (1 cucharada)
Salsa de soja (50 ml)
Elaboración
Marinamos la carne...
Disolvemos la miel en la salsa de soja. En un táper con buen cierre ponemos los solomillos, la pimienta machacada, el perejil troceado, el zumo y la ralladura del limón, y la salsa de soja.
Cerramos el táper y mezclamos bien todo. La metemos en la nevera toda la noche.
Al día siguiente...
Cortamos las patatas en trozos de bocado y la cebolla en juliana y lo ponemos todo en una bandeja de horno con sal, pimienta y aceite.
Lo cocinamos 10 minutos a 180 grados.
Recuperamos los solomillos y su marinada.
Sacamos la bandeja del horno y sobre la cama de patata y cebolla colocamos los solomillos. Regamos con el vino y la marinada.
Lo hacemos 20 minutos a 200 grados.
Emplatamos: los solomillos en medallones y a un lado las patatas.
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