La Semana Santa es momento para descansar o para conocer las tradicionales procesiones de multitud de rincones de España. En un caso y en el otro, a la hora de comer y disfrutar comiendo podemos aprovechar para conocer y disfrutar su gastronomía.
Acaso el mayor símbolo de la gastronomía de estos días, la tradicional, sea el potaje de vigilia, también llamado de Cuaresma, pero también está, por sólo citar algunas, el bacalao al ajo arriero, los flamenquines, el pulpo a la Sanabresa y, claro, los dulces: torrijas, rosquillas fritas, crespells... Pero la lista estará coja si no incluimos los huevos o monas de Pascua.
La costumbre de intercambiar huevos de chocolate y de caramelo como obsequios de Pascua es típica en Murcia, Valencia y Barcelona, pero en realidad data de poco más de un siglo. Las monas de Pascua cambian dependiendo de la región. En algunos sitios son figuras de chocolate, en otros llevan algún tipo de relleno o fruta confitada.
Vamos a la cocina a hacer una mona de Pascua tradicional. El huevo cocido —que en realidad nadie se come, reconozcámoslo— podemos sustituirlo por un huevo de chocolate. En ese caso, y por razones obvias, no hay que hornearlo sino ponerlo en el centro de la mona una vez esté fría. Solo tenemos que dejar el hueco en la masa antes de hornear.
Ingredientes de la mona de Pascua
- Harina de fuerza (300 gr)
- Levadura fresca (12 gr)
- Azúcar blanco (50 gr)
- Leche entera tibia (115 gr)
- Ralladura de 1 limón
- Huevo (1)
- Aceite de girasol (45 gr)
- Huevos cocidos (4)
- Azúcar blanco (25 gr)
- Huevo batido (1)
Elaboración de la mona de Pascua
- Ponemos todos los ingredientes (salvo los de decoración) y mezclamos.
- Amasamos hasta conseguir una masa lisa y homogénea (unos 15 minutos).
- Hacemos una bola y la dejamos levar cubierta con un paño húmedo o papel film hasta que doble el volumen (entre 1 y 2 horas).
- Recuperamos la masa, la dividimos en 4 partes iguales y les damos forma de bola.
- Achatamos un poco cada bola y hacemos una agujero en el centro.
- Colocamos un huevo duro en cada agujero.
- Pincelamos con el huevo batido, cubrimos de nuevo (paño humedo o film) y dejamos levar hasta que doble el volumen (tardará 1 hora).
- Precalentamos el horno a 200ºC.
- Repetimos el pincelado con huevo y espolvoreamos el azúcar.
- Metemos al horno hasta que se doren (unos 15 minutos).
- Para comer dejamos templar.
Y lo dicho... si hay peques en casa, sustituimos los huevos de gallina por huevos de chocolate.
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