Cómo hacer un aceite de ajo espectacular como un cocinero estrella

El aceite de oliva es oro líquido, pero si además le quieres dar un toque de sabor y de gracia a tu aliño, toma nota de cómo elaborar este delicioso aceite de ajo. 
Aceite de ajo.
Aceite de ajo.
Getty Images/iStockphoto
Aceite de ajo.

Nunca sobran los elogios para el mejor aceite que existe, el de oliva, ese tesoro milenario y mediterráneo, ese lujo para cocinar cada día. Pero a partir de nuestro maravilloso aceite podemos crear otros.

Hierbas, especias, semillas... el aceite de oliva (y no sólo ese) puede tener una nueva vida, otra personalidad, si lo mezclamos para crear un aceite aromático. Una de las posibilidades más fáciles y resultonas es hacer un aceite de ajo.

Es una de nuestras banderas gastronómicas —los franceses llevan siglos criticando nuestro recetario porque "todo sabe a ajo"—. Es uno de los ingredientes más utilizados en nuestra cocina y es posible cultivarlo en casa de forma sencilla ya que no requiere demasiado mantenimiento.

El ajo es fuente de proteínas, de minerales como el potasio, fósforo y yodo, de vitaminas del grupo B. Posee propiedades con efectos saludables para el organismo, sobre todo por las sustancias antioxidantes. Sí, el ajo es muy saludable y tiene una amplia utilización farmacológica.

Ajo morado español.
Ajo morado español.
ARCHIVO / EFE

Pero el ajo tiene sus haters. Esos que no soportan su olor, su sabor o que lo aceptan pero sólo si es un aroma en el guiso. Para ellos, pero no sólo, podemos hacer un aceite de ajo. Es fácil.

Aceite de ajo, el método

Sólo hay que poner aceite a templar y luego añadir los ajos. Después sólo queda que el tiempo haga su trabajo porque lo dejaremos confitar. Conseguiremos así un aceite ideal para condimentar ensaladas, guisos y demás.

  1. Empezamos lavando las cabezas de ajo con agua tibia. Limpias, las dejamos esperar para que se vaya el agua y queden secas.
  2. Pelamos los dientes de ajo. Seguramente por haberlos lavado cueste algo más... pero nada que no remedie un buen cuchillo.
  3. Precalentamos el horno a 180ºC. Ponemos los ajos en una bandeja y los metemos al horno durante 15 minutos.
  4. Retiramos y dejamos que los ajos se enfríen.
  5. TRUCO: echamos un poco de zumo de limón en un recipiente (así rebajamos la intensidad del ajo) y luego los ajos.
  6. Finalmente, añadimos el aceite de oliva (el mejor que tengamos, idealmente virgen extra). Mezclamos bien para integrarlo todo.
  7. Colamos en el recipiente final (de cristal) y listo. Podemos añadir una rama de la hierba que nos guste: orégano, tomillo, albahaca, etc.

Hemos usado zumo de limón para suavizar el sabor del aceite, pero también lo podemos lograr reduciendo el número de ajos o la cantidad de aceite. En un par de veces que lo hagamos habremos encontrado la mezcla e intensidad de nuestro gusto.

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las mejores novedades para disfrutar al máximo del placer de comer.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento