Al ajillo, en salsa, asado, el conejo es una de las carnes más saludables que puedes comer de cualquier manera y en cualquier lugar. Es, además, una buena alternativa para esos días en los que no sabes qué cocinar. Su facilidad y rapidez de elaboración hacen que sea una receta fantástica, y con la que nunca fallarás.
Su alto contenido en proteínas hace que sea un plato estupendo y riquísimo para cualquier persona. Incluso apto para alérgicos e intolerantes, ya que no contiene sustancias peligrosas, solo los sulfitos contenidos en la pequeña cantidad de vino, que, incluso, podría sustituirse por vinagre.
Ingredientes
Para elaborar este delicioso plato solo necesitarás:
- 450 g de conejo troceado en porciones
- 5 dientes de ajo
- 10 g de harina de trigo
- 200 ml de vino blanco
- 200 ml de caldo de carne
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
- Zumo de limón
Elaboración
Empezamos retirando los restos de piel o de grasa de los trozos de carne, se sazonan y se pasan por harina. A su vez, ponemos en una cazuela cinco cucharadas de aceite de oliva. Cuando esté caliente, doramos los cinco dientes de ajo sin pelar.
Conforme vamos enharinando las porciones de carne, las incorporamos en la cazuela para freírlas hasta que estén doradas todas. Este proceso tardará unos 20 minutos.
Una vez listas la carne, cortamos un limón por la mitad y lo exprimimos por encima de cada porción. A continuación, agregamos el vino y el caldo de carne con el fuego en máxima potencia hasta evaporar el alcohol y que se consuma toda la salsa, esto llevará unos tres minutos.
Una vez reducida la salsa, agitamos la cazuela para que todas las porciones cojan sabor. Por último, añadimos perejil, corregimos el punto de sal si fuera necesario y... ¡Ya estaría listo!
Propiedades del conejo
El conejo es una de las principales carnes blancas que todo el mundo recomienda, y no solo por su sabor, sino por sus propiedades ricas en proteínas. Cuenta, además, con numerosos beneficios para la salud. Es una carne baja en calorías.
Su componente principal es el agua, aunque realmente destaca por su alta cantidad de proteínas. Es fácilmente digerible y muy tierna, debido a su bajo contenido en colágeno. Por ello es muy recomendable para aquellas personas que sufren hiperuricemia.
Destacada, además, por su riqueza en vitamina B, como la vitamina B12, la B3 y la B3; y, también, en vitamina E. Aporta también importantes cantidades de hierro, zinc y magnesio, teniendo un bajo contenido en sodio.
Su valor nutricional por cada 100 g es de:
- 13o kcal
- 5,3 g de grasa
- 0 g de hidratos de carbono
- Entre 18 y 20 g de proteínas
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