El marisco, pese a su gran sabor y sus propiedades nutricionales, parece estar reservado en la cocina para ocasiones puntuales. En España, los mariscos más populares son las gambas, las nécoras, las langostas, los pulpos, los mejillones y los percebes. De estos últimos, la prensa inglesa ha llegado a decir que se parecen a un alien y al monstruo de Stranger Things. Además, hay mariscos que, pese a ser parecidos, tienen un precio más elevado y que conviene saber diferenciar para evitar engaños a la hora de consumirlos, algo ocurre con frecuencia con las zamburiñas, que se sustituyen por volandeiras o vieras, más económicas que las primeras.
La forma y el aroma de estos moluscos bivalvos son muy similares entre sí, por lo que pueden confundirse fácilmente. Por ello, hay quienes pueden aprovechar y cumplir con aquello de dar gato por liebre, lo que en este caso se traduce en vender un plato de zamburiñas al precio más elevado que tiene este marisco y, en realidad, ofrecer uno de volandeiras sin que los consumidores se den cuenta. La fama de las zamburiñas proviene de su tamaño, calidad y jugosidad de la carne que, finalmente, tiene u sabor más diferente a los otros moluscos.
¿Qué son más caras las vieiras o las zamburiñas?
El valor gastronómico que tienen cada uno de estos moluscos es el que marca su precio en el mercado y, por ello, merece la pena diferenciarlos para saber en todo momento qué comemos y si estamos pagando el precio adecuado por ello. La producción de zamburiñas, que principalmente se da entre las costas gallegas y asturianas, es escasa, mientras que su demanda en el mercado es alta. Así, su escasez lleva de forma inevitable a que estas se sitúen como el molusco más caro de entre los tres similares.
Los mariscos más similares en forma y textura son, en este caso, la volandeira o la vieira del Pacífico, un producto de calidad, pero con un valor más económico en el mercado por su mayor producción respecto a las zamburiñas. Por ello, la comercialización fraudulenta puede ser algo habitual, ya que se pueden ofrecer volandeiras o vieiras como si fueran zamburiñas.
Cómo diferenciar las volandeiras, las zamburiñas o las vieiras
El tamaño es uno de los principales factores diferenciales entre los moluscos. Las zamburiñas, la especie gallega más apreciada, tiene el tamaño más pequeño de las tres, con un máximo de seis centímetros de longitud. Las vieiras, en cambio, pueden alcanzar incluso los 20 centímetros, mientras que las volandeiras llegan a los 10. La concha de la zamburiña es alargada y con más estrías en la superficie, de un color grisáceo o morado, muy oscuro, igual que el interior.
Para saber diferenciar si estamos ante una volandeira, también debemos fijarnos en la concha: redondeada, simétrica, con estrías menos marcadas y de un color naranja claro o rosáceo, excepto el interior que es prácticamente blanco. En el caso de las vieiras, además de más grandes, encontramos tonos marrones o rosados, con pequeños toques de color en su interior.
Respecto a la carne, la de las zamburiñas es jugosa, de color blanquecino y con un sabor más intenso y dulce que el que presentan los otros moluscos, que tienen una carne más compacta y con un sabor menos concentrado. Además, en el caso de la volandeira, la parte comestible tiende a un color rojo-anaranjado, mientras que el de la vieira se decanta por un músculo naranja y blanco.
Además, el sabor de la volandeira y la zamburiña puede ser más difícil de identificar por las aguas en las que se alimentan, generalmente gallegas. Por su parte, las vieiras, proceden, en su mayoría, de la acuicultura de las costas de Chile o Perú, desde donde llegan a España congeladas por lo que, aunque su sabor es bueno, no puede compararse con el de los otros mariscos. Así, esto le permite tener un gusto más suave respecto a la intensidad marina de las variedades galletas.
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