La Comarca de la Sierra Norte de Madrid es un paraíso cultural donde cada rincón cuenta una historia fascinante. Esta zona es un destino ideal para quienes buscan desconectar del bullicio urbano y disfrutar de actividades al aire libre como senderismo, ciclismo, escalada o actividades acuáticas.
Así lo explica Elena Rubio, coordinadora del Centro de Innovación Turística de la Sierra Norte: “La Sierra Norte dispone de una gran variedad de ecosistemas. Por un lado, la zona de montaña que ocupa la mayor parte de la comarca, con la Sierra de Somosierra, La Cabrera, La Morcuera y gran parte de la Sierra de Guadarrama. Y por otro, destacan los valles, lagunas, embalses y cuencas de los ríos Jarama y Lozoya”.
Pero la Sierra Norte es mucho más: es un viaje a las tradiciones y a la gastronomía más auténtica. “En general, la Sierra Norte de Madrid destaca por su gastronomía de herencia tradicional con productos de la tierra: asados de carne en hornos de leña, guisos de legumbres y verduras de la huerta”, describe Rubio. Acompaña tu experiencia con un buen vino de la región y disfruta en los establecimientos, bares y restaurantes de este entorno idílico.
Además, encontrarás una amplia variedad de alojamientos para todos los gustos y necesidades: desde acogedoras casas rurales hasta hoteles con encanto. Para los más aventureros, también hay disponibles campamentos y albergues.
En la Comunidad de Madrid existen once villas reconocidas por la riqueza de su patrimonio cultural. Vamos a profundizar en cuatro de estos municipios, que se encuentran en la Sierra Norte, para que puedas conocer un poco más del extenso patrimonio serrano.
BUITRAGO DEL LOZOYA: DEL PASADO A LA VANGUARDIA
Enclavado en un entorno natural impresionante, Buitrago del Lozoya cautiva a sus visitantes con su imponente conjunto fortificado, uno de los mejor conservados de la Comunidad de Madrid y declarado Bien de Interés Cultural desde 1993. Además de la muralla, cuenta con varias edificaciones del siglo XIV: la Torre del Reloj, la iglesia de Santa María del Castillo y el castillo de los Mendoza, de estilo mudéjar. No podemos pasar por alto su emblemático Museo Picasso-Colección Eugenio Arias, con más de 60 obras que el genial artista legó a su peluquero.
Por otro lado, los senderos naturales que serpentean alrededor del río Lozoya ofrecen oportunidades para disfrutar de la belleza natural de la región. El atractivo de su paisaje va de la mano con la calidad de sus productos naturales. Los chuletones y los judiones con morcilla son delicias que se preparan a fuego lento.
Para aquellos que buscan una experiencia gastronómica auténtica, los restaurantes locales sirven platos tradicionales con ingredientes frescos y de temporada. Si quieres pasar la noche podrás hacerlo en cualquiera de los alojamientos rurales con encanto del municipio, eligiendo entre apartamentos turísticos, hostales u hoteles rurales.
“La Sierra Norte dispone de una gran variedad de ecosistemas. Por un lado, la zona de montaña que ocupa la mayor parte de la comarca, con la Sierra de Somosierra, La Cabrera, La Morcuera y gran parte de la Sierra de Guadarrama"
Rascafría, oasis de paz
Rascafría es un destino lleno de sorpresas, desde el impresionante Monasterio de Santa María de El Paular, con una rica colección de pinturas de Vicente Carducho, hasta el tranquilo bosque finlandés. Para llegar a este insólito lugar, primero debemos cruzar el Puente del Perdón. Su nombre se debe a que en ese lugar los reos tenían la posibilidad de apelar su sentencia por una última vez e intentar cambiar su condena.
Cuenta con una mención especial el inspirador arboreto Giner de los Ríos, frente al Monasterio de El Paular, con ejemplares de especies caducifolias de diferentes partes del planeta. Árboles de Asia, Europa, Norteamérica y Sudamérica se encuentran allí separados por áreas.
Como vemos, es una escapada ideal para los entusiastas de la naturaleza que también encontrarán una amplia gama de actividades al aire libre, como senderismo, ciclismo y observación de aves. Después de un día explorando, los viajeros pueden disfrutar de la deliciosa cocina local en los acogedores restaurantes de la zona. El municipio cuenta también con una amplia oferta de alojamientos rurales que te permitirán alargar tu estancia en esta villa de Madrid.
Patones: un destino gastronómico de referencia
Patones es un municipio dividido en dos núcleos urbanos: Patones de Arriba y Patones de Abajo. Patones de Arriba es uno de los mejores ejemplos de la arquitectura de pizarra negra en la Comunidad de Madrid. Gracias a su valor etnográfico y ambiental fue declarado Bien de Interés Cultural en la Categoría de Conjunto Histórico en el año 1999.
Entre sus atractivos encontramos la Iglesia de San José (datada del siglo XVII), las eras, el lavadero y la Fuente Nueva (de principios del siglo XX). El Cerro de la Oliva nos muestra que Patones ya estaba habitada desde los albores de nuestra historia. En este yacimiento encontramos restos arqueológicos de diferentes ocupaciones que abarcan desde la prehistoria, pasando por la época romana, visigoda y la Edad Media.
Cuenta con una oferta gastronómica diferente y única, con restaurantes rurales, íntimos y románticos, que le han posicionado como destino gastronómico de referencia en la región. Las casas rurales, apartamentos y hoteles boutique de esta villa de Madrid tienen el toque perfecto de lo que se conoce como rural chic.
Villas de la Sierra Norte
Esta zona es un destino ideal para quienes buscan desconectar del bullicio urbano y disfrutar de actividades al aire libre como senderismo, ciclismo, escalada o actividades acuáticas
Torrelaguna, una joya por descubrir
Con su impresionante conjunto histórico-monumental, Torrelaguna es una joya por descubrir. Aquí nacieron el Cardenal Cisneros y Santa María de la Cabeza y vivió San Isidro Labrador. Su casco histórico está a la altura de tan ilustres personajes. Destaca la iglesia de Santa María Magdalena, ejemplo de la arquitectura gótica madrileña, el Pósito, el antiguo Hospital de la Santísima Trinidad (actualmente la Casa de la Cultura) y el Convento de Franciscanos de la Madre de Dios.
Un municipio único que combina historia, naturaleza y gastronomía de una forma incomparable
Además de lo interesante de cada uno de estos edificios, perderse por sus calles también es un auténtico placer, disfrutando de las pequeñas tiendas y tahonas tradicionales, en las que probar los pasteles típicos de la Villa o un buen cocido en puchero de barro en alguno de sus restaurantes, algunos de ellos con cuevas recuperadas y visitables. Si deseas pasar la noche en este insólito lugar, sus gentes te acogerán con su gentileza serrana bajo los techos de sus alojamientos más rurales.
Como hemos visto, la Sierra Norte de Madrid es un destino único que combina historia, naturaleza y gastronomía de una forma incomparable. Tal y como afirma Elena Rubio: “El reto es que el desarrollo del turismo siga una línea sostenible en la que se priorice la protección del patrimonio natural y cultural, incluyendo la preservación de las costumbres, tradiciones y a la población local que aquí reside”.
Ya sea que busques sumergirte en la historia de sus encantadoras villas, explorar la belleza natural de sus paisajes o deleitarte con su exquisita cocina regional, esta comarca tiene algo para todos. ¡Atrévete a descubrirla y prepárate para vivir momentos inolvidables!
Más información en la web de Turismo Madrid.
Alayans Studio - Reportaje: Patricia Díaz - Diseño: Beatriz Areste y Pablo Calahorra Subías - Maquetación web: Javier Asuar
