La asamblea general de la Unión de Ligas Europeas de Baloncesto (ULEB) creará una comisión de trabajo para intentar encontrar una solución al conflicto que mantiene con la Euroliga, que defiende un modelo distinto de la máxima competición continental.

En su última junta, la ULEB aprobó un nuevo modelo de Euroliga basado en la Liga de Campeones que organiza la UEFA, en la que participarían 30 equipos de 25 países, que se clasificarían en función de sus méritos deportivos en sus respectivas Ligas nacionales. La Euroliga apuesta, en cambio, por un modelo de competición cerrado.

A esta reunión ha asistido Jordi Bertomeu, director ejecutivo de la Euroliga, organismo con el que se buscará conjuntamente una solución al conflicto.

Asimismo, las Ligas asistentes han obtenido el compromiso de Bertomeu de tener derecho a voto en la próxima Asamblea de la Euroliga. De esta forma, los 24 clubes y las 9 Ligas representadas podrán votar pese a no clasificarse para el 'Top 16', según recoge un artículo del protocolo de constitución de la Euroliga, y podrán decidir el modelo de competición futuro.

Por otra parte, la asamblea general de la ULEB ha ratificado a Eduardo Portela, presidente de la ACB, como máximo dirigente de la asociación para los próximos cuatro años.

Portela, quien lleva presidiendo dicha organización desde 1998, ha explicado en un informe la situación que vive el baloncesto europeo y las diferencias de criterio que separan a los proyectos de competición de la ULEB y de la Euroliga, y ha anunciado la realización de un Congreso Europeo con la participación de todos los estamentos del mismo.