Este martes, Simeone volvió a ser preguntado por Fernando Torres. "Hemos hablado con Fernando. Él sabe lo que pienso, él me ha comentado lo que cree y la charla queda reservada para nosotros dos, pero sí he hablado con él y él ha hablado conmigo. Eso es lo más importante y nos deja tranquilos de acá para adelante".

Tras la respuesta quedó claro que Simeone no cuenta con él, como luego se filtró a través de los medios que siguen la actualidad rojiblanca. Con Gil Marín como testigo, la reunión entre ambas partes aclaró el panorama. La continuidad de Torres depende de su rendimiento hasta el próximo verano, que sería cuando abandonaría el club de sus amores. Pero, hoy por hoy, está fuera.

La sanción FIFA de no poder fichar en verano de 2016 y en enero de 2017 obligaba a ficharle antes del 1 de febrero, algo que no pasará. El madrileño está cedido por el Milan y los plazos eran esos. En esa reunión, Gil le comunicó a Torres que el Atlético iba a pedir la suspensión cautelar de la sanción a FIFA y que, si se la concedían y su rendimiento era bueno, se quedaría en el club. Así que la continuidad del ídolo del Calderón depende, en gran medida, de la improbable cautelar que dé la FIFA.

Sin embargo, a Simeone no le convence, ya que el ariete solo ha marcado dos goles desde esta temporada. "No es ningún secreto que yo quiero seguir en el Atlético, en mi club", dijo Torres en octubre. Pocos meses después, Simeone le ha comunicado que se tiene que buscar club.