Pero Roland Garros es el Grand Slam de tierra, y Nadal es su defensor. Y el zurdo español tiene claro que una victoria aquí sobre Hewitt serviría para dejar claro, si no lo está ya, su actual dominio sobre esta superficie.

Nadal, como recordó en la conferencia de prensa posterior a su épica victoria sobre el francés Paul Henri Mathieu después de casi cinco horas, tiene en mente cada una de sus derrotas contra Hewitt.

Y es que el australiano es un jugador tan combativo como él, pero que ha abandonado las situaciones de privilegio y ahora deambula en el puesto 14 del mundo.

Su lesión de tobillo durante el torneo de Hamburgo no ha limitado las ganas del australiano de acabar con la fuerza del superhombre de Manacor.

Hewitt sigue con tratamientos de rehabilitación, masaje, hielo y ultrasonido, y parece que le va bien, como demostró este sábado al imponerse al siempre peligroso eslovaco Dominik Hrbaty en tres sets.

Hewitt llevaba hasta esta temporada casi dos años sin pisar la tierra, pero dispone almacenados buenos recuerdos en esta superficie. "Mis mejores partidos fueron en Copa Davis, contra Kuerten y Costa, y ellos no fueron unos cualquiera en este tipo de pistas".

"De todas formas Nadal tiene un juego diferente y el de mañana será un partido diferente al último que tuvimos hace año y medio en el Abierto de Australia.

Siempre hemos tenido duelos intensos cada vez que jugamos en pista dura, pero él es ahora mismo el jugador más peligroso y duro, en esta superficie, como todos han podido comprobar".

"Tengo un plan para jugar contra él, lo que tengo que hacer es saber ponerlo en práctica sobre la pista pero él es de esos jugadores que te concede pocas oportunidades", reconoció Hewitt.

En su ánimo de mejorar en tierra, el de Adelaida también se apuntó este año en Roland Garros al cuadro de dobles, con su compatriota Wayne Arthurs, pero perdieron a la primera contra el francés Michael Llodra y el belga Olivier Rochus, por 6-1 y 6-4.

Si supera a Lleyton Hewitt, Rafael Nadal será el cuarto tenista español con más partidos consecutivos ganados en Roland Garros (11), pero quedará aún lejos de la marca de Sergi Bruguera, con 19.

Lleyton Hewitt lleva trece partidos consecutivos ganados a jugadores españoles, todos ellos en superficies duras o de hierba. El último en derrotarle fue Juan Carlos Ferrero en los cuartos de final del Open de los Estados Unidos 2003.

La última vez en la que Lleyton Hewitt disputó un Grand Slam estando fuera del 'top-ten' mundial fue en el Open de Australia 2004.

Lleyton Hewitt nunca ha ganado a un español en Roland Garros. Su primer partido en un Grand Slam fue con un wild-card en el Open de Australia 1997 y fue superado por Sergi Bruguera.

En París ha perdido con Tommy Robredo en el 2003, Albert Portas en 2001, y Alberto Costa en 2000.