32 selecciones —entre ellas, España— y millones de espectadores estarán pendientes del sorteo final de la 21ª edición de la Copa Mundial y que se celebra este viernes 1 de diciembre en el Palacio Estatal del Kremlin en Moscú.

La Roja conocerá, por fin, a sus tres rivales en la fase de grupos. La selección de Lopetegui sabe desde hace tiempo que afronta el trámite del el bombo 2. Algo que permite especular con un más que posible grupo de la muerte o, en el mejor de los casos, un trayecto más asequible aunque nunca sencillo.

Para evitar suspicacias, habida cuenta de que equipos como España o Inglaterra no son cabezas de serie, la FIFA ha querido desvelar los secretos del sorteo y ha introducido una regla que sí puede influir notablemente en el resultado del mismo: el principio de la separación geográfica. Ningún grupo puede tener más que un equipo por confederación, con la excepción de Europa, ya que son 14 los equipos europeos clasificados para el Mundial. Pero tampoco puede haber más de dos europeos por grupo.

Los cuatro bombos con los 32 equipos estarán a la izquierda del escenario y las urnas con los ocho grupos a la derecha, distribuidas por orden alfabético (de la A a la H).

Rusia —cabeza de serie junto a Alemania, Brasil, Argentina, Portugal, Francia, Bélgica y Polonia— es la única que conoce su lugar, ya que será el número uno del Grupo A, mientras el resto tendrá que esperar a lo que dicte la suerte.

Equipos como Perú, Colombia, México y Uruguay, del segundo bombo, no pueden recalar en el mismo grupo que Argentina y Brasil, equipos con los que ya se han fajado durante las durísimas eliminatorias latinoamericanas. Por ello, las posibilidades de que España se las vea en la primera fase con los dos gigantes latinoamericanos son muy grandes.

La mecánica del sorteo plantea dos escenarios para España según el rival que le salga del bombo 1. Si a España le toca una de las seis selecciones europeas cabezas de serie, quedará automáticamente bloqueada la opción de que se enfrente a cualquier otra representante de Europa de los bombos 3 y 4. Si a los de Lopetegui les toca en suerte Brasil o Argentina, los bombos 3 y 4 quedarían abiertos prácticamente en su totalidad (salvo Serbia si en el bombo 3 toca un europeo).

Así, más o menos se puede prever de antemano cuál puede ser la composición de hipotéticos –y temidos– grupos de la muerte, que podrían ser un Brasil/Argentina - España - Dinamarca - Nigeria o un Alemania - España - Senegal - Japón/Corea del Sur. Opciones mucho más asequibles serían un grupo tipo Rusia - España - Irán - Panamá o un Polonia - España - Senegal - Arabia.

- Bombo 1: Rusia, Alemania, Brasil, Portugal, Argentina, Bélgica, Polonia y Francia.

- Bombo 2: España, Perú, Suiza, Inglaterra, Colombia, México, Uruguay y Croacia.

- Bombo 3: Dinamarca, Islandia, Costa Rica, Suecia, Túnez, Egipto, Senegal e Irán.

- Bombo 4: Serbia, Nigeria, Australia, Japón, Marruecos, Panamá, Corea del Sur y Arabia Saudí.

32 países que buscan la corona que ahora posee Alemania. La corona y los millones que ganarán por proclamarse campeón el próximo 15 de julio. Nada menos que 338 millones de euros se ponen en juego. Esa será la cifra que repartirá la FIFA en el próximo Mundial.

¿Cómo se repartirán esos millones? El organismo ya ha repartido 6,7 millones de euros a cada una de las 32 selecciones clasificadas para la fase final, y eso será lo que se embolsen pasen o no la fase de grupos.

Los que pasen, es decir, los que lleguen hasta octavos, se llevarán 10,14 millones y 13,5 los que no pasen de cuartos. Así, para los 4 supervivientes finales del torneo, los premios serán 18,6 para el cuarto clasificado, 20,28 para el tercero, 23,6 para el subcampeón y un total de 32, 1 para el campeón.

La periodista rusa María Komándnaya será la consorte de Gary Lineker en la ceremonia del sorteo que, propiamente dicho, se prolongará durante media hora. El resto de la ceremonia serán actuaciones musicales a cargo de la cantante local Alsú y el guitarrista norteamericano de origen portugués Nuno Betancourt.

La ceremonia también hará un repaso de todos los Mundiales de la historia y sus principales protagonistas, desde los héroes uruguayos del "Maracanazo" hasta el gol del alemán Götze en la prórroga ante Argentina en 2014.

También habrá tiempo para que el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, pronuncie unas palabras, aunque no se puede descartar que el jefe del Kremlin, Vladímir Putin, también haga una visita sorpresa al Palacio de Congresos y acapare toda la atención.

Por de pronto, el trofeo de la Copa Mundial, que subirá al escenario de la mano del alemán Miroslav Klose, el máximo goleador de la historia del torneo.